¿Qué fue el gulag?

Historia
ALEXANDRA GÚZEVA
Para describir el sistema penal soviético, Alexánder Solzhenitsyn, que sobrevivió a ocho años de encarcelamiento en el gulag, escribió un enorme libro titulado ‘Archipiélago Gulag’ tras recopilar cientos de memorias de otras personas que consiguieron sobrevivir a los campos de trabajo. Nos atrevemos a explicarte brevemente esta horrible página de la historia soviética.

GULAG: ¿qué significa?

Los soviéticos utilizaban comúnmente la palabra лагеря (lageriá; “campos”) para referirse al sistema penal, ya que la palabra “gulag” significa de hecho la dirección de los campos de trabajo. “GULag” es la grafía correcta del acrónimo de Главное управление лагерей (Glávnoie Upravléniye Lageréi; “Dirección Principal de Campos”). Pero esta abreviatura se convirtió en un nombre de uso frecuente para los propios campos, muy probablemente tras la publicación y popularización del Archipiélago Gulag de Solzhenitsyn.

La estructura se formó en la década de 1930 como un departamento del ministerio llamado “Comisariado del Pueblo para Asuntos Internos”, o NKVD en abreviatura, otra aterradora abreviatura de la época soviética. Pero los primeros campos aparecieron incluso antes de que se creara el “gulag”.

¿Cuándo funcionaron y durante cuánto tiempo?

Los primeros campos aparecieron en Rusia tras la Revolución de 1917. Los bolcheviques decidieron deshacerse de todos sus enemigos y reunirlos en un solo lugar. Los lugares más “convenientes” para su objetivo eran los monasterios. Rodeados de grandes muros y con muchas habitaciones pequeñas, eran prisiones preparadas.

El monasterio Solovetski fue uno de los primeros en convertirse en uno de estos campos. Situado en el archipiélago Solovetski, en el mar Blanco, al norte de Rusia, estaba lejos de la civilización y era imposible escapar de él.

Cuando Stalin afianzó su poder a principios de la década de 1930, puso en práctica el principio de “corregir” a la gente mediante el trabajo, por lo que los campos de prisioneros se convirtieron en campos de trabajos forzados. Y entonces un antiguo empresario -y antiguo prisionero de Solovetski-, Naftali Frenkel, ideó un sistema para utilizar eficazmente a los prisioneros como mano de obra gratuita. Para ello fue necesario ampliar los campos y poner a trabajar a muchos más prisioneros.

Los campos funcionaron hasta 1956, habiendo sobrevivido tres años a Stalin. Tras su muerte, hubo una amnistía masiva, pero aún así mucha gente permaneció internada en campos.

¿Cuántos campos gulag hubo en la URSS?

La monstruosa estructura del gulag incluyó unos 30.000 lugares de detención a lo largo de su historia. Cuando algunos de ellos cerraron, inmediatamente aparecieron otros en otros lugares de todo el país. Los campos tenían diferentes objetivos económicos e industriales. Cada dirección estaba encabezada por una oficina separada (había unas 50) con un complicado sistema de gestión y reunía varios campos bajo una misma dirección.

Por ejemplo, el primer gran proyecto de construcción llevado a cabo por los presos del gulag fue el Canal Mar Blanco-Báltico. La construcción fue dirigida por el departamento del campo de Belomorsko-Baltiyski. Más tarde empezaron a aparecer muchos campos en Extremo Oriente. Los tristemente célebres campos de Kolimá se encargaban de la construcción de infraestructuras, la extracción de minerales e incluso las pruebas de materiales radiactivos peligrosos.

Otros campos se ocupaban de trabajos de construcción, tala de árboles, pesca, costura, agricultura, fabricación de calzado y muchas otras producciones. Los campos siguieron trabajando durante la Segunda Guerra Mundial, abasteciendo al Ejército Rojo.

¿Cuántas personas fueron enviadas al gulag?

Según las estadísticas del Museo de Historia del Gulag, más de 20 millones de prisioneros fueron recluidos en los campos desde la década de 1920 hasta la de 1950. En total, más de 1 millón de personas murieron allí. La presencia del mayor número de prisioneros tuvo lugar en 1941: alrededor de 1,5 millones de personas, mientras que en 1952 y 1953 hubo más de 1,7 millones.

Según diversas fuentes, estas personas representaban el 10% de toda la economía soviética. Por ejemplo, el 70% de todo el estaño de la URSS era extraído por los prisioneros del gulag. Ciudades siberianas y del Lejano Oriente como Vorkutá, Magadán, Komsomolsk del Amur fueron fundadas en los lugares de los antiguos campos del gulag por los prisioneros. Tras su liberación, muchos de ellos permanecieron allí.

El complejo del campo de Vorkutá estaba situado a 160 km por encima del círculo polar ártico. La ciudad tenía una población aproximada de 15.000 habitantes y unos 50 campos con más de 50.000 reclusos.

Ni la fama, ni los premios, ni un estatus especial podían garantizar la protección contra el gulag. Entre los prisioneros hubo escritores, comandantes del ejército, líderes del partido comunista, científicos e ingenieros famosos. Incluso había centros especiales de investigación en las prisiones, donde seguían desarrollando proyectos de éxito. Al mismo tiempo, la mayoría de los directores del gulag acabaron siendo prisioneros de su propia estructura.

¿Por qué enviaban a la gente al gulag?

Tras la Revolución, los bolcheviques detuvieron a miembros de partidos políticos contrarios, personas de origen noble, científicos, representantes de la intelectualidad, sacerdotes, oficiales, campesinos ricos y muchos otros.

Durante la gran purga de Stalin, se deshizo de todo tipo de “enemigos públicos”, desde los antiguos campesinos ricos hasta los que potencialmente podían tener vínculos con ellos. A finales de los años 20, el Código Penal soviético adoptó el artículo 58, que incluía un montón de puntos: traición, propaganda antisoviética, espionaje, etc. Sólo en virtud de este artículo fueron condenadas más de 3 millones de personas. Más información sobre la magnitud de las represiones de Stalin aquí.

Incluso una broma desconsiderada podía costar la libertad a la gente. Yevgenia Gínzburg pasó veinte años en campos y en su libro Viaje al torbellino recuerda a una reclusa, la moscovita Anna, de 28 años, que fue detenida y llevada a prisión directamente desde su cama. Al principio, no entendía el motivo de su detención. “¿Por qué fue, qué crees? Bromas. Dos chistes [políticos]. Y quieren encarcelarme siete años, tres y medio por cada uno de ellos”, citó Gínzburg a Anna.

Además, es muy probable que los familiares e hijos de las personas encarceladas también fuesen detenidos. Los hijos de algunos presos también eran enviados al gulag, mientras que los niños que nacían allí eran separados de sus padres. Muchas de esas personas se enfrentaron a destinos sombríos. Más información sobre por qué los soviéticos enviaban niños al gulag y qué les ocurría.

Sin embargo, no sólo los presos “políticos” eran enviados al gulag. Los delincuentes comunes también eran condenados a pasar tiempo en campos de trabajo y los profesores solían compartir barracón con asesinos, ladrones y otros delincuentes graves que tenían sus propias reglas injustas para sobrevivir en prisión, lo que a su vez empeoraba aún más la vida de los demás.

¿Por qué era tan horrible el gulag?

“Todos estábamos cansados de la comida de los barracones. Cada vez que traían la sopa en grandes cubas de zinc suspendidas de postes, nos daban ganas de llorar. Estábamos dispuestos a llorar por miedo a que la sopa fuera escasa. Y cuando se producía un milagro y la sopa era espesa, no podíamos creerlo y nos la comíamos lo más despacio posible. Pero incluso con la sopa espesa en el estómago caliente seguía habiendo un dolor punzante; llevábamos demasiado tiempo hambrientos. Todas las emociones humanas -amor, amistad, envidia, preocupación por el prójimo, compasión, ansia de fama, honestidad- nos habían dejado la carne que se había derretido de nuestros cuerpos durante estos largos ‘ayunos”. Esta es sólo una de las aterradoras citas de los Cuentos de Kolimá de Varlam Shalámov, que escribió a partir de su propia experiencia.

Existen otros libros sobre el gulag y las represiones de Stalin, pero la mayoría de ellos estuvieron prohibidos en la URSS hasta la perestroika o incluso la década de 1990. Aquí hemos reunido algunos de los títulos más importantes . El primer relato que abordó el tema se publicó en 1962 y fue Un día de Iván Denísovich, de Solzhenitsyn.

Todo el país se dio cuenta entonces de que en los campos se vivía en condiciones inhumanas. El único objetivo era sobrevivir. A la mala alimentación, tal y como la describió Shalámov, se sumaba el frío extremo, ya que los campos estaban situados con frecuencia en el norte y la gente trabajaba al aire libre con ropa ligera. Los prisioneros tenían que seguir un plan diario que era casi imposible de cumplir y si uno no lo hacía podía verse privado de las raciones de comida. Mientras tanto, los barracones del campo solían estar llenos de piojos, y la falta de higiene y de tratamiento médico provocaba enfermedades, epidemias y muertes.

Era fácil perder la humanidad en tales circunstancias. Algunos intentaban no volverse locos escribiendo cartas a sus familias. Algunos padres, por ejemplo, incluso intentaban educar a sus hijos a través de las cartas. Sin embargo, muchas personas no podían recibir las respuestas. Muchas familias no sabían dónde estaban detenidos sus miembros e incluso si estaban vivos o no.

¿Qué significa el gulag para la Rusia moderna?

El gulag se ha convertido en parte de la cultura popular, no sólo en Rusia, sino en todo el mundo. “Enviarle al gulag” es un insulto popular en Internet. El videojuego Call of Duty: Modern Warfare 2 tiene una misión titulada “Gulag” que tiene lugar en un fuerte parecido al verdadero campo soviético. Según el argumento, fue fundado en el siglo XVIII en Kamchatka y durante los tiempos de la URSS y la Tercera Guerra Mundial (que ocurre en el juego) se retenía allí a los prisioneros. Y entonces es atacado por los americanos para rescatar a uno de sus hombres...

Sin embargo, sigue siendo un tema increíblemente delicado para muchos rusos. Muchas familias rusas tienen parientes que pasaron décadas en campos de concentración o incluso murieron allí. Así que la gente sigue desenterrando la historia, investigando el pasado de sus propias familias, ya que la mayoría de los documentos del gulag fueron clasificados hasta la década de 1980.

Los escritores rusos contemporáneos también siguen explorando el tema. Entre las novelas recientes más destacadas sobre el gulag están El monasterio, de Zajar Prilepin, y El aviador, de Yevgueni Vodolazkin. Siguen apareciendo películas sobre el gulag, tanto largometrajes como documentales.

Hay varias instituciones en Rusia que se ocupan de investigar la historia del gulag, archivar su pasado y presentarlo a las nuevas generaciones para que esta página profundamente traumática y oscura de la historia no se olvide nunca.

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