1. Aurora (San Petersburgo)
Este famoso barco fue uno de los primeros cruceros protegidos fabricado en Rusia. Según la tradición solo el monarca podía nombrar los barcos de guerra.
Nicolás II tuvo que elegir entre 11 variantes y finalmente se quedó con "Aurora". Se trata del único barco de la flota del zar que no recibió un nuevo nombre tras la revolución. En 1905 estuvo en la batalla de batalla de Tsushima, en la guerra ruso-japonesa. En 1917 el barco realizó un disparo que supuso el principio de la toma del Palacio de Invierno de San Petersburgo y de la revolución bolchevique. En julio el Aurora tiene previsto volver a San Petersburgo tras haberse sometido a una gran reforma. La renovada exposición mostrará cómo participó el barco en la guerra ruso-japonesa y en las dos guerras mundiales.
2. Santo Nikolái (Krasnoyarsk, 4.000 km al este de Moscú)
Alexander Sibiriakov, que fuera dueño de minas, fábricas y compañías de transporte en el siglo XIX soñaba con la creación de una única ruta navegable en Siberia y él mismo participó en las expediciones de investigación.
Uno de sus barcos era el Santo Nikolái, que a finales del siglo XIX y principios del XX era uno de los más rápidos de la zona. Contaba con 14 camarotes de primera y segunda clase, mientas que los viajeros de tercera se quedaban en la borda. En dos ocasiones contó con pasajeros ilustres. En 1891, a la vuelta de un viaje de Japón, se montó en Krasnoyarsk en que sería el último zar, Nicolás II. En 1897 llevó a Vladímir Lenin. Después de la revolución el barco se rebautizó como "Armada Roja" y “Friedrich Engels” e incluso se llegó a utilizar como barcaza petrolera. Se convirtió en museo en los años 70.
3. Angara (Irkutsk, 5.200 km al este de Moscú)
El rompehielos más antiguo del mundo se botó en el año 1900. Se construyó en el astillero de Nikolski por la empresa W. G. Armstrong Whitworth & Co Ltd por orden del Comité de Ferrocarriles de Siberia.
Durante la construcción las piezas se transporon en ferry. El Angara estuvo en funcionamiento hasta principios de los años 60.
En 1990 amarraron el barco en Solnetsni, en el golfo de Irkutsk. El año pasado en el Museo Regional de Irkutsk se inauguró una exposición que muestra la historia del propio barco y de la navegación en el lago Baikal.
4. Vityaz (Kaliningrado, a 1.100 km al oeste de Moscú)
Este buque ha cambiado de nombre en cuatro ocasiones a lo largo de su historia. Al principio se llamó Marte. Tras la Segunda Guerra Mundial pasó del Reino Unido a la URSS y en 1949 se convirtió en Vityaz. Participó en investigaciones en el mar de Ojotsk, en el Mar Negro y el del Japón, así como en los océanos Atlántico, Pacífico e Índico. Desde su borda se midió la profundidad de la fosa de las Marianas.
En 1994 el buque quedó amarrado en el paseo marítimo de Pedro el Grande de Kaliningrado, que ahora es un museo sobre la historia de la navegación y de los descubrimientos geográficos. También hay una exposición dedicada al ámbar, un material muy común en Kaliningrado.
5. Krasin (San Petersburgo)
Se trata de otro rompehielos construido para la Armada rusa por los talleres de Sir W. G. Armstrong Whitworth & Co Ltd. Antiguamnte se llamó Svyatogor y se incluyó en la flotilla del océano Ártico en otoño de 1917. Años después el buque fue tomado por los ingleses. Cuando el gobierno soviético decidió recuperar el rompehielos, el representante comercial Leonid Krasin participó activamente en las negociaciones. Posteriormente, el barco fue renombrado en su honor.
A finales de la década de los 1920 salvó a los miembros de la expedición italiana al Ártico de Umberto Nobile, después de que su barco sufriera un naufragio.
Desde los años 90 el rompehielos es un museo y está amarrado en el astillero del Teniente Schmidt en San Petersburgo.
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