1. Reconstrucción de Palmira
El conflicto en Siria comenzó en 2011 y Rusia ha prestado su ayuda diplomática, humanitaria y militar al presidente Bashar Assad y su administración de manera continua.
Una de las formas en que los rusos ayudaron fue con la reconstrucción de la antigua ciudad de Palmira, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, y que sufrió graves daños a manos de los terroristas. Los equipos rusos llevaron a cabo operaciones de desminado, mientras que el gobierno, junto con el Museo del Hermitage, participó en proyectos de restauración de muchos valiosos monumentos históricos de la ciudad.
El costo total de la reconstrucción se ha estimado en 1.000 millones de dólares.
2. Incendios forestales de 2019
En agosto de 2019, más de 80.000 incendios forestales arrasaron zonas de difícil acceso en la parte brasileñoa de la selva amazónica. El gobierno de Bolsonaro rechazó la ayuda financiera para hacer frente a los incendios. A pesar de ello, Rusia, que tiene un largo historial de ayuda durante los incendios, envió un avión de carga Il-76 a la vecina Bolivia, para atacar los incendios en su lado del Amazonas.
El Il-76 es capaz de transportar hasta 50.000 toneladas de agua, que luego se vierte sobre el incendio. Bolivia recibió el avión de forma gratuita, asumiendo solo los gastos de mantenimiento.
En otras ocasiones los rusos ayudaron, incluyendo incendios forestales en Grecia, Montenegro, Serbia, Israel y hasta EE UU, en 2005. En 2017 el avión ayudó en los incendios que tuvieron lugar en Chile, y los locales apodaron “Luchín”, al enorme avión ruso.
3. Desastre nuclear de Fukushima
El 11 de marzo de 2011, un terremoto destruyó la planta de energía nuclear Fukushima-1 en Japón. El terremoto provocó un tsunami, que eliminó todas las fuentes de energía de la planta, lo que llevó a la fusión del reactor y a varias explosiones. Según algunos científicos la catástrofe fue de la misma escala que la de Chernóbil.
Poco después del accidente, Rusia envió 160 miembros del equipo de búsqueda y rescate para unirse a los japoneses en la búsqueda de sobrevivientes bajo los restos. En total el área cubierta por los rusos medía más de 100 kilómetros cuadrados.
5. Terremoto y tsunami en el Océano Índico
Uno de los terremotos más devastadores de la historia de la humanidad ocurrió el 26 de diciembre de 2004, con epicentro cerca de la isla indonesia de Sumatra. Más de 230.000 personas perdieron la vida como resultado del tsunami que siguió al terremoto.
Los gobiernos de Indonesia, Tailandia y Sri Lanka hicieron un llamamiento a la comunidad internacional para que prestara ayuda, y Rusia fue uno de los que respondió al llamamiento.
No más de 24 horas después del terremoto y el posterior tsunami, Sri Lanka recibió un equipo de trabajadores rusos de búsqueda y rescate con perros entrenados. El 11 de enero, los aviones del Ministerio de Emergencias de Rusia entregaron sistemas de purificación de agua, tiendas de campaña, alimentos y suministros para salvar vidas a la capital Colombo.
Con el fin de evitar una crisis alimentaria en toda regla en la región, Rusia también envió 20.000 toneladas de trigo a Indonesia.
5. Ciclón Idai
El 4 de marzo de 2019, un destructor ciclón golpeó simultáneamente a Mozambique, Madagascar, Zimbabwe y Malawi.
El desastre se cobró más de 1.000 vidas y provocó enormes daños e inundaciones, lo que obstaculizaba la entrega de ayuda humanitaria a las zonas afectadas. Fue entonces cuando muchos países ofrecieron asistencia, con Rusia entre ellos.
En respuesta a una solicitud oficial de Mozambique, Moscú envió 30 toneladas de tiendas, mantas y alimentos. Cuatro días después se envió a Malawi la misma cantidad.
Así desinfecta el contingente ruso en Italia las residencias de Bérgamo.