Cómo ayudó Rusia a Jon Bernthal de ‘The Punisher’ a conquistar Hollywood

Cultura
BORÍS YEGÓROV
Jon Bernthal es quizás el único actor importante no eslavo de Hollywood que obtuvo sus galones como actor en Rusia.

La estrella de Corazones de acero y The Walking Dead, Bernthal, está teniendo mucho éxito tras conseguir el papel principal en la serie de Marvel, The Punisher.

Bernthal es único entre los actores de Hollywood por una razón en particular: eligió Rusia como  plataforma de lanzamiento, y el lugar ayudó a dar forma a su carrera.

¿Por qué Rusia?

En 1999, Bernthal, de 23 años, dejó el Skidmore College en Saratoga Springs (EE UU), donde jugaba al béisbol, y partió a Rusia para tomar clases de interpretación en la Escuela de Teatro de Arte de Moscú. Fue tutelado por Alma Becker, su maestra en las clases de actuación.

Un gran aficionado al teatro ruso, Alma insistió en que fuera a Rusia, diciéndole que la mejor escuela de teatro estaba allí. Él siguió su consejo. Sabiendo que nunca antes ningún estadounidense había tomado esa ruta, Bernthal estaba decidido a triunfar.

Sin ningún conocimiento de ruso, Bernthal llegó a Moscú y pasó con éxito las audiciones en la Escuela de Teatro de Arte de Moscú, comenzando su estancia de dos años en la capital rusa.

Impactante Moscú

Cuando fue estudiante, la futura celebridad de Hollywood no llevaba una vida lujosa. Vivía en una pequeña habitación en el centro con otras tres personas y a veces dormía en el suelo. “Encendía las luces del baño por la noche y veía cucarachas por todas partes”, recuerda Bernthal.

A finales de la década de 1990, Rusia acababa de salir de una profunda crisis económica y seguía sufriendo la corrupción y las bandas de criminales que causaban estragos, se apoderaban de fábricas, etc. En su tercer día en el país, Bernthal tuvo la “suerte” de encontrarse con la mafia rusa. Estaba de camino a casa e iba por una calle vacía. Entonces un automóvil se detuvo frente a él. Salieron dos tipos, abrieron el capó y sacaron a una mujer con un vestido rojo del maletero.

“No protesta. No grita. Me está mirando. Recuerdo que pensaba que se parecía mucho a Nicole Kidman”, recuerda Bernthal.

“La empujaron a la acera, fueron a un lado del edificio y empezaron a abrirle la cabeza”, continúa. Bernthal les atacó y agarró a uno de los chicos, que sacó un arma y la puso en la cabeza de Bernthal, mientras le decía: “¡Vete!”.

Bernthal confiesa que todavía le atormenta no saber qué le pasó a la mujer. 

Experiencia para toda la vida

“Estoy muy agradecido a la estancia que he tenido en Moscú. Siento que me convertí en un hombre gracias a los estudios que allí realicé. Me convirtió en artista y me abrió los ojos”, dijo.

Oleg Tabakov, una de las estrellas más famosas del cine ruso, fue uno de los que le enseñó. Por otro lado, confesó que estudiar en el teatro fue duro, pero increíble.

“Fue un verdadero privilegio estar allí. Había una dura disciplina. Crecí practicando deporte, como boxeo, etc. Mi tiempo en el Teatro de Arte de Moscú fue tan riguroso y duro, y quizás más disciplinado que cualquiera de los deportes organizados que practiqué”.

Bernthal dice que le gustaba la forma dura y honesta de estudiar en Rusia. “Si no eres bueno, te lo dicen y tienes que irte”, explicó, añadiendo que nunca le dijeron que no era bueno. “Quizá no tuvieron suficiente tiempo”, bromeó. 

Bernthal adora la cultura rusa y dice que le encantaba caminar por las calles de Moscú, entre los innumerables monumentos a poetas, escritores, dramaturgos y pintores. Además de actuar, la estrella de The Punisher disfrutó jugando béisbol en la liga semiprofesional local, e incluso estudió acrobacia y ballet.

De hecho, fue Rusia la que le dio al estadounidense la oportunidad de encontrar su lugar en Hollywood. Durante su estancia en Moscú, el director del Institute for Advanced Theater Training de la Universidad de Harvard en el American Repertory Theater le llamó la atención y fue invitado a hacer allí su maestría.

Tras pasar dos años en Moscú, Bernthal regresó a EE UU y comenzó su destacada carrera cinematográfica y teatral. Dice que nunca olvidará lo que el país eslavo le dio.

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