António de Vieira, el elegido del emperador
En 1697, durante una larga gira por países europeos, el zar Pedro el Grande visitó Holanda, donde los gobernantes locales organizaron una batalla naval para deleite del monarca invitado.
Mientras disfrutaba del espectáculo, el zar ruso se encontró con un joven y fuerte marinero que se subió hábilmente a los veleros y ató las velas. El joven saltó entre ellas “como un mono”, como dice la crónica rusa del suceso.
Era António de Vieira, de una familia judía indigente que se había trasladado de Portugal a Ámsterdam. El zar, que solía juzgar a las personas no por su origen y su riqueza, sino por su capacidad y su fuerza de carácter, invitó al marinero a servir a Rusia, y el portugués aceptó inmediatamente la oferta del emperador.
Pedro el Grande no se equivocó en su elección: en diez años António de Vieira hizo una carrera increíble, pasando de simple paje a general adjunto. En 1718, el monarca le nombró general de la policía de San Petersburgo y se encargó de restablecer el orden en la entonces capital del Imperio Ruso.
Antón Manuilovich Devier, como llegó a llamarse allí, llevó el servicio de forma brillante. Formó destacamentos especiales de policía, construyó puestos avanzados en las entradas de la ciudad e introdujo la vigilancia nocturna en las calles.
Además, fue él quien creó el servicio de bomberos de la capital, desarrolló nuevos sistemas de desecación de pantanos, prohibió el vertido de basuras en ríos y mares (y las infracciones pasaron a castigarse con latigazos) y prohibió la venta de productos de mala calidad o a precios injustificados.
Pedro el Grande quedó muy satisfecho con el jefe de policía. “Inflexible y rápido en el cumplimiento de las órdenes reales, causaba tal miedo entre todos los habitantes de la ciudad que temían al oír su nombre2, escribió Holstein Friedrich Bergholz, un noble alemán que vivió en Rusia durante unos años.
Sin embargo, tras la muerte del emperador en 1725, la carrera de Antón Devier se estancó: otro hombre cercano a Pedro, el príncipe Alexánder Ménchikov, hizo todo lo posible por perjudicarle.
El conflicto entre Ménchikov y Devier comenzó cuando el portugués, que aún no ocupaba un alto cargo, pidió la mano de Ana, la hermana de Ménchikov, en matrimonio. El portugués no sólo recibió una grosera negativa, sino que fue capturado y golpeado por los sirvientes del príncipe ruso.
El emperador intervino y permitió el matrimonio, pero la enemistad entre ambos no hizo más que aumentar. Los dos no perdieron la oportunidad de perjudicar la vida del otro.
El 27 de mayo de 1727, al comienzo del reinado de Pedro 2, a los doce años, bajo el control total de Ménchikov, Antón Devier fue acusado de tener intenciones de apartar al monarca del poder. Fue privado de su título de nobleza, de sus bienes, fue azotado y exiliado a Siberia.
En 1741, la emperatriz Isabel de Rusia retiró todos los cargos contra Devier y lo envió de vuelta a San Petersburgo. Tres años después, el portugués volvió a ocupar el puesto de jefe de policía de la capital. Sin embargo, la salud del portugués, a sus 63 años, ya era inestable y después de sólo 6 meses murió.
Gomes Freire de Andrade, héroe de dos guerras
Hijo del enviado portugués en Viena, Gomes Freire de Andrade nunca pensó en viajar a la lejana Rusia. Hizo carrera militar en Portugal, alternando el servicio como en el ejército de tierra en la marina del país.
Sin embargo, al no tener la oportunidad de participar en una guerra importante, Gomes acabó deprimido, y en 1788, con el permiso de la corte real, partió hacia la guerra ruso-turca. En ella, junto con el ejército de Yekaterinoslávki, participó en el asedio de la fortaleza de Ochakov (que hoy es una ciudad del sur de Ucrania).
En la gélida mañana del 17 de diciembre, las tropas rusas atacaron, y Gomes Freire fue uno de los primeros en escalar los muros de la ciudadela. Por decreto de la emperatriz Catalina II, el valiente portugués fue condecorado con la orden militar de San Jorge.
Una guerra no fue suficiente para Gomes, y en 1789 se dirigió al mando ruso con la petición de que le enviaran al mar Báltico, donde, en ese momento, ya se estaban llevando a cabo operaciones militares contra Suecia.
Debido a su excelente mando de las baterías flotantes y de un barco lento con artillería pesada durante la Primera Batalla de Rochensalm el 24 de agosto, se le concedió una espada de oro “Por su valor” y fue ascendido a coronel.
“Es bueno escuchar los elogios que no sólo los jefes, sino también sus compañeros expresan por el valor, la diligencia y el trabajo activo del comandante Gomes Freire de Andrade”, informó el secretario de la Misión portuguesa en San Petersburgo, Noronha Torresana, al ministro portugués. En 1791, tras el final de las guerras contra los turcos y los suecos, Gomes Freire de Andrade regresó a su tierra natal.
Pero los portugueses aún volverían a Rusia en 1812, en una visita que, sin embargo, fue todo menos amistosa. Como oficial de la Legión Portuguesa, participó ese año en la invasión del Gran Ejército de Napoleón al Imperio Ruso.
Sin embargo, el portugués no llegó a participar en batallas contra sus antiguos compañeros de armas, ya que ejerció como gobernador militar de la ciudad de Disna (que ahora forma parte de Bielorrusia, en el norte del país). A finales de 1812, abandonó Rusia para siempre, junto con los pocos restos de las tropas francesas.
Síguenos en nuestro canal de Telegram: https://t.me/russiabeyondes
Estimados lectores,
Nuestro sitio web y nuestras cuentas en las redes sociales corren el riesgo de ser restringidos o prohibidos, debido a las circunstancias actuales. Por lo tanto, para mantenerte al día con nuestros últimos contenidos, simplemente haz lo siguiente:
Suscríbete a nuestro canal de Telegram: https://t.me/russiabeyondes
- Suscríbete a nuestro boletín semanal por correo electrónico: debajo de cada artículo hay un espacio para hacerlo.
- Habilita las notificaciones push en nuestro sitio web.
- Instala un servicio de VPN en tu ordenador y/o teléfono para tener acceso a nuestra web, aunque esté bloqueada en tu país.
LEE MÁS: 5 españoles que sirvieron brillantemente al Imperio ruso y a la URSS