Después de descartar la posibilidad de que las mujeres feas en Rusia puedan ser arrojadas desde un acantilado o enviadas al gulag, hemos decidido investigar más a fondo esta cuestión y se nos han ocurrido las siguientes explicaciones.
En primer lugar, recordamos el proverbio popular ruso: “No hay mujeres feas, simplemente no hay suficiente vodka”. Muy sexista, por supuesto. Pero, ¿qué más se puede esperar de la “patria espiritual” del vodka? Al venir a Rusia, todos los turistas sueñan con saborear un poco de vodka, lo que hace que todo les parezca un poco más bello de que lo es en realidad.
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En segundo lugar, cabe recordar que en la época soviética, durante 70 años las mujeres soviéticas tenían muy pocas oportunidades de vestirse bien y maquillarse. Tenían que aguantar largas colas para conseguir los zapatos que deseaban... o cualquier zapato de calidad aceptable. También tenían que coserse sus propios vestidos y arreglar los viejos por falta de dinero. Con la llegada de la década de 1990, las mujeres por fin tuvieron acceso a la moda y los cosméticos occidentales (aunque el dinero seguía escaseando). Se podría decir que desde entonces las rusas sienten la necesidad de “iluminar” con su belleza todas las habitaciones y salas en las que entran.
Alexéi Maishev/Sputnik
En tercer lugar, es una cuestión de costumbre. Las madres y abuelas (que en la posguerra se enfrentaron al problema de la falta de hombres en la URSS) enseñaron a las jóvenes a arreglarse siempre las uñas y el pelo, y a no presentarse nunca en ningún lugar sin maquillaje, sobre todo delante de los hombres, incluso de un marido.
Nina Zótina/Sputnik
¿Y qué piensas tú de las mujeres rusas? ¿Por qué son tan guapas?
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