Los rusos actuales miran con ironía algunos de los hábitos que tienen sus padres, como guardar cosas para el futuro o apenas sonreír en la calle. Pero sería bueno adoptar algunos de los siguientes hábitos soviéticos para ayudar a evitar un desastre ecológico.
1. Hacerse con una bolsa de tela
¿Qué harías si no hubiera bolsas de plástico en el supermercado? En la Unión Soviética todos llevaban encima una de bolsa de cuerda llamada avoska (que deriva de la antigua palabra rusa avós, que se podría traducir como “quizás”). Las bolsas eran compactas, fáciles de lavar y secar y duraban años. Eran lo suficientemente pequeñas como para caber en el bolsillo y se podían transportar hasta 70 kg. Además, las fabricaba la Asociación Rusa de Ciegos. Hoy en día, algunos diseñadores han recuperado la avoska, convirtiéndola en un accesorio de moda que se puede encontrar en las tiendas de moda.
2. Reutilización de las bolsas de plástico
En la época soviética había otra actitud hacia el plástico. Había escasez de este producto, que se consideraba una especie de artículo de lujo. Ahora es difícil de creer, pero en la Unión Soviética era incluso un poco elegante usar una bolsa de plástico en lugar de una normal. Por esta razón se lavaban y se utilizaban para muchas cosas. A día de hoy todavía es habitual tener en casa una bolsa de plástico llena de bolsas. ¿Qué hace la gente con ellos ahora? Las usa como bolsas de basura. No es una mala manera de reducir la cantidad de plástico que usas, ¿no te parece?
3. Plantar en la dacha
Comer alimentos cultivados en tu propia región, incluyendo frutas y verduras de temporada, es mejor para el medioambiente que comer alimentos que vienen de lejos. Los alimentos locales no requieren tantos conservantes para mantenerse frescos y se utiliza menos combustible en su transporte. Si no tienes tu propia casa de campo, siempre puedes comprar productos cultivados localmente.
4. Reparar las cosas en vez de tirarlas
Sí, hay hasta chistes sobre cómo la gente de la Unión Soviética nunca tiraba nada porque era muy difícil conseguir muchas cosas. Por ejemplo, nadie tiraba las botas solo porque los tacones estuvieran viejos o una chaqueta cuando se le había roto la cremallera. Antes de tirar algo, piensa si realmente necesitas comprar algo nuevo o si el objeto viejo es lo suficientemente bueno.
5. Reciclar vidrio y papel
Todo el mundo sabe que el vidrio y el cartón son más respetuosos con el medioambiente que el plástico. Muchos rusos recuerdan que cuando eran niños la leche solo venía en paquetes triangulares de dibujos animados o en botellas de vidrio. El queso y las salchichas también se cubrían con papel artesanal en lugar de polietileno. Todos estos envases eran reutilizables.
Los escolares y estudiantes soviéticos recogían papel usado y libros innecesarios para reciclarlos. Estas colectas tenían un nombre específico: makulatura. Incluso se organizaban concursos para ver quién acumulaba más. El papel reciclado se utilizaba para fabricar cartón. Así es como los niños ayudaron a la industria soviética a usar menos árboles.
Otras personas de la época soviética recogían botellas de vidrio y las llevaban a los departamentos especiales de las tiendas. Antes de reciclarlas había que lavar la botella y quitarle las etiquetas. Las botellas se depositaban en grandes cantidades, lo que motivaba a la gente a recogerlas. Hoy en día, la mayoría de los países desarrollados cuentan con sistemas similares.
6. Darle una segunda oportunidad a la ropa
En la URSS no había tantas tiendas de ropa como hay ahora, así que la gente tenía que ser creativa para estar a la moda. Mucha gente era capaz de coser su propia ropa o también era habitual llevarla al sastre. El único problema era conseguir tela suficiente. La ropa vieja se modificaba y se transformaba en ropa nueva, y luego, cuando ya estaba demasiado gastada para usarla, se usaba como trapos de limpieza. Te damos una idea: convierte tus vaqueros viejos en pantalones cortos de verano o haz una camiseta con un vestido viejo y desgastado para reducir la cantidad de residuos.
7. Organización de subbótniks
¿Sabías que en la URSS la gente limpiaba los patios y los espacios públicos de las zonas residenciales? Recolectaban los desechos y plantaban árboles durante una limpieza especial llamada subbótnik (de la palabra subbota, que significa sábado). En Rusia, esta tradición aún continúa en algunas instituciones educativas y estatales.
En la Rusia actual se siguen manteniendo algunos otros hábitos de la época soviética. Te lo contamos aquí.