Las chicas
1. Flores, flores por todas partes
No es ningún secreto que a las mujeres rusas les encantan las flores - el país incluso tiene una fiesta nacional basada en el regalo de elegantes ramos a las mujeres. Incluso parece que muchas mujeres que frecuentan Tinder creen que esta pasión por la extravagancia floral aumenta sus posibilidades de conseguir una pareja en la app, con una gran cantidad de perfiles que contienen al menos un ramo brillante.
“El mensaje es: 'Soy lo más femenina posible’”, dice Anna, una usuaria de Tinder de 19 años de Moscú. “Es un cliché y te encuentras a muchas chicas publicando enormes ramos de flores en sus biografías, incluso sin nadie en la foto junto a estos. Me parece muy extraño”.
2. Posando en HD
Si has visto mujeres rusas de vacaciones, sabrás que la cultura selfie es muy importante para ellas. Por lo tanto, los perfiles de Tinder no son para aficionados. ¿Qué quiere decir esto? Sesiones profesionales de fotos de estudio, vestidos de diseño, peinados caros y, por supuesto, flores. ¡Hay que currárselo!
Para Nastia, de 23 años, de Krasnoyarsk, todo gira en torno a la honestidad: “Si tengo una cita con un chico, siendo realista, me va a ver tal y como soy. Puede que una sesión de fotos mejore un poco mi imagen, no está de más lucir lo mejor posible, me da más swipes. Después de todo, de eso se trata en este juego”.
3. A la caza de un marido
En Occidente, se ha debatido mucho sobre si Tinder es una aplicación para ligar. Si bien el reciente Mundial de fútbol ha provocado discusiones similares en Rusia, unas cuantas muestras dejarán muy claro que el tema de sexo no se trata de la misma manera aquí.
“Prácticamente el perfil de todas las chicas dice: ‘No bebo, no fumo ni voy a los clubes’”, dice Ben, un inglés de 26 años que vive en Moscú. “No tengo ni idea de por qué.”
Tal vez Evguenia, de 28 años, de Moscú, se enfrente al puritanismo de Tinder y pueda ayudar a Ben: “Estoy buscando marido, (incluso lo pone en mi perfil de Tinder). Es mejor ser directa; no estoy interesada en hacer perder el tiempo a nadie. Y si no bebo ni fumo, a algunos les pareceré más 'material de esposa'”. En la honestidad está la clave.
4. No escribo primero
“Si la biografía de una chica no está vacía, a menudo sólo tiene una frase o dos sobre que es tímida, vergonzosa y no escribe a nadie”, dice Ben. “No me da buenas vibraciones, pero mirando el lado positivo, significa que por lo general están más dispuestas a reunirse en persona.”
Los chicos
5. Verde, verde por todas partes
¿Cuál es el equivalente masculino de las flores de las chicas en Tinder? ¡El dinero, parece! Al menos, según Alice, una irlandesa de 24 años:
“Dondequiera que mires en el Tinder ruso, hay tipos exhibiendo sus montones de pasta. Fajos enteros de billetes, dispersos por las camas y alfombras de su obschaga (dormitorio de estudiantes). Presumiblemente sólo estás mostrando tu 'riqueza', pero no engañas a nadie, amigo”.
6. Lindos gatitos
Después de demostrar que pueden mantener a una mujer con sus montones de lana, parece que los hombres del Tinder ruso optan por mostrar su lado más tierno colgando fotos en los que aparecen acurrucados junto a sus amigos felinos.
Anguelina, de 22 años, de San Petersburgo, no se impresiona por esta técnica: “Seamos honestos, el criterio principal para lograr un swipe es tu apariencia. Un gato no te hará más o menos atractivo, pero sí podría hacerte parecer desesperado”. Brutal.
7. Autos molones
Al igual que con el dinero, a los hombres del Tinder ruso les encanta exhibir su desahogo económico mostrando su nuevo Lada. Según Anguelina, también añaden un toque temerario a su aspecto:
“Un perfil de Tinder ruso no estará completo sin una foto tuya apoyado en tu coche deportivo de gama media, vistiendo una chaqueta de cuero y gafas de sol. Es el sueño de toda chica… ¡pues no!”.
8. Tomando la iniciativa
En términos generales, los hombres rusos tienen un enfoque mucho más directo a las citas que sus contrapartes occidentales. Esto significa siempre escribir primero, sugiriendo las ideas para la cita, y luego pagar en ellas, hábitos que sorprendieron a Jessica, una estadounidense de 32 años:
“Si un tipo ruso te escribe después de emparejarte en Tinder (a menudo no lo hará), normalmente te pedirá una cita en un plazo de cinco minutos. Tengo una actitud compleja ante esto: sí, ser directo es bueno, pero al mismo tiempo, me gusta charlar un rato primero para conocer al tipo. He tenido demasiadas citas a ciegas incómodas como para decir ‘sí' a una cita después de cinco minutos de toparme con alguien en Tinder”.
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