A oídos de un ruso suena raro al principio. ¿Valientes? ¿Por qué los extranjeros están convencidos de que los rusos no tienen miedo?
Pero, ¿en qué otro país los niños saltan desde edificios de varios pisos para divertirse, los hombres hablan tranquilamente sobre la ruta a seguir después de que su automóvil caiga al río, las mujeres hablan con los osos como si fueran sus amigos? La falta de miedo es la única explicación posible a este comportamiento, que los historiadores dicen está presente en los genes de los rusos.
Historia
Si la temeridad es una cualidad nacional, entonces debería estar impresa en el ADN y pasar de una generación a otra. Sorprendentemente hay historiadores que promueven esta teoría.
Uno de los historiadores rusos más famosos, Nikolái Karamzín, cree firmemente que para descubrir las raíces de la dureza e intrepidez rusas habría mirar a la historia y a las características de las antiguas tribus que habitaron el territorio de lo que actualmente constituye la Rusia moderna.
“Menospreciando las duras condiciones climáticas, intrínsecas al clima del norte, consiguieron superar el hambre y todas las necesidades. Estuvieron comiendo comida cruda y tosca”, escribió Karamzín sobre los antiguos eslavos.
El historiador, que estudió las batallas de los antiguos eslavos contra sus enemigos, concluye que eran guerreros frenéticos y brutales, a los que no les importaba demasiado enfrentarse a una batalla. Los relatos de temeraria valentía de los antiguos guerreros sorprenden a Karamzín. El historiador argumenta que la audacia temeraria era una característica inherente de los antiguos eslavos y que la formación de una sociedad más compleja, que premiaba a los mártires intrépidos, hizo que esta característica se desarrollara hasta el extremo: “La rapacidad hizo que surgiera la valentía, la avaricia lo fomentó”.
El clima
Un usuario llamado Antón Oumnikov ha colgado este mapa (que parece algo alterado por el Photoshop), tratando de explicar la falta de miedo, aludiendo a las duras condiciones climáticas. “Todo lo blanco es nieve”, escribe Oumnikov. “Casi todo el país está cubierto de ella. Cubierto de nieve durante muchos meses al año. Osos y lobos alrededor”.
En realidad es un poco exagerado. El tiempo en Rusia puede ser duro, pero no es que el país esté helado las 24 horas al día y los 12 meses del año. A pesar de ello, muchos historiadores afirman que fueron precisamente las duras condiciones climáticas las que fomentaron que los eslavos se convirtieran en criaturas valientes.
“Una naturaleza con bienes escasos demanda un trabajo duro y constante y mantiene al hombre en un estado de entusiasmo. Está claro que una población con este tipo de carácter es capaz de establecer las bases para una vida estatal y subordinar a las tribus que tengan un carácter opuesto”, escribió Serguéi Soloviov, un influyente historiador ruso.
Mira a los rusos actuales, cada año se quejan de la llegada del invierno pero nadie le tiene miedo. Quizá la teoría sobre el clima contenga algo de verdad.
Los rusos lo han visto todo
Dejando de lado las nubes, los rusos han vivido tiempos horribles pero, inevitablemente han salido a flote una y otra vez. Piénsalo: la revolución rusa, la guerra civil, la colectivización, la desposesión, las purgas estalinistas, la Segunda Guerra Mundial, el estancamiento, severas crisis económicas y el el colapso del estado, todos estos hechos ocurrieron en solo un siglo.
Evidentemente, no todo el mundo ha sido testigo de estos horrores pero las memorias nacionales han pasado de generación en generación y formaron la particularmente dura mentalidad de los rusos.
Un ruso actual no tiene por qué ser siempre valiente, pero está listo para enfrentarse estoicamente a las pequeñas fatalidades del destino, solamente porque está seguro de que lo que venga no va a ser peor que lo que ocurrió en el pasado.
Masculinidad y vodka
La cultura rusa premia la masculinidad y menosprecia cualquier manifestación de debilidad. Si amenazas con llamar a la policía al verte rodeado de gangsters en una oscura esquina de una ciudad rusa, los agresores seguramente se mueran de risa (y es muy probable que tu novia rusa te deje por un macho).
Se supone que los hombres tienen que ser capaces de lidiar con sus problemas sin buscar ayuda del exterior. Esta actitud predominante hace que la gente prefiera dejar la ley de lado y confiar en sus propias capacidades a la hora de resolver sus problemas.
Como resultado, se apremia a los rusos a que actúen como si no tuvieran miedo y a aumentar el riesgo en situaciones que podrían resolverse con poca sangre. Mezcla eso con vodka y ya tienes a personas genuinamente valientes que temen parecer débiles. ¿Confuso? Los propios rusos lo están, pero nunca se sabe.