El nuevo puente de la capital cultural de Rusia ha recibido el nombre de Agustín de Betancourt (1758, Puerto de la Cruz, Tenerife - 1824, San Petersburgo), el español que trabajó a las órdenes del zar Alejandro I durante 16 años, situó al Imperio ruso a la vanguardia tecnológica.
El nuevo puente de San Petersburgo, inaugurado el 13 de mayo, ha unido las islas Petrovski, Serni y la de Dekabrístov (Decembristas, en español) a través del Málaia Nevá. El coste de la construcción asciende a unos 8.800 millones de rublos (118 millones de euros, al cambio de hoy), según el diario Kommersant. En abril de este año las autoridades de San Petersburgo han decidido que el puente llevará el nombre del ingeniero e inventor español.
Agustín de Betancourt fue invitado por el zar ruso en 1808, a la edad de 50 años, para formar parte del Departamento de Vías de Comunicación de Rusia. Sus logros y méritos en el país eslavo fueron innumerables. El español llevó a cabo la reforma de la fábrica de armas de Tula mediante la instalación de una máquina de vapor, la ampliación del puerto de Krondstadt y la construcción de un canal entre la fábrica del Izhora y San Petersburgo. Participó en la construcción de la primera carretera importante de Rusia: San Petersburgo-Nóvgorod-Moscú. Sentó las bases de la escuela de ingeniería rusa y dirigió hasta el final de su vida el Instituto de Vías de Comunicación de San Petersburgo, fundado por su iniciativa. Participó también en la construcción del Manezh de Moscú.
Murió en la “capital norteña” de Rusia y fue enterrado en el cementerio del monasterio de Alexánder Nevski de San Petersburgo.
Si quieres saber más sobre la obra de Agustín de Betancourt en Rusia, lee este texto.
¿Quieres recibir la información más destacada sobre Rusia en tu correo electrónico? Pincha aquí y recibe cada viernes el material más interesante.