Vítebski, la primera estación de Rusia y el lugar de Anna Karénina

Descubra un lugar histórico de San Petersburgo que no es un palacio. La arquitectura de principios del siglo XX es una muestra del esplendor de la Rusia imperial.

La primera línea ferroviaria de Rusia apareció en 1837 y unía San Petersburgo con Tsárskoe Seló, lugar de residencia de la familia Romanov situada en las afueras de la capital imperial. Konstantín Thon construyó la estación de Tsarskoselski, la primera de Rusia, que desde 1936 se llama la estación Vítebski.

En 1904 se construyó una nueva estación en estilo Art Nouveau, con una decoración en la que destacan las líneas curvas, los ornamentos de inspiración vegetal, los elegantes bustos femeninos y la ausencia de simetría. El amplio espacio de las salas de espera de primera y segunda clase se utiliza actualmente para fotografías de boda.

A menudo este espacio recibe el nombre de Sala de las Pinturas, ya que las paredes están decoradas con cuadros, amplios espejos y paneles pintados que muestran la historia de la estación Tsarskoselski. De vez en cuando la sala acoge conciertos. Actualmente los pasajeros solo utilizan la sala de espera de tercera clase.

En el pasado era posible llegar al restaurante a través de un arco situado en la Sala de la Pinturas. Actualmente este paso está cubierto y hay obras de restauración en el restaurantes. Todavía sobreviven un aparador, fragmentos de pinturas, marcos de espejo y puertas en estilo art nouveau de principios del siglo XX.

“En el restaurante ya hay accesorios utilizados durante el rodaje de Anna Karénina, dirigida por Karén Shajnazárov, en 2015”, explica la guía e historiadora Marina Zubkova. Los directores Serguéi Soloviov y Bernard Rose también rodaron aquí sus versiones de la famosa novela de Lev Tolstói, con Tatiana Drúbich y Sophie Marceau como protagonista, respectivamente. También Danila Brágov, de la película de culto Brat, aparece llegando a la estación. En la versión soviética de Las aventuras de Sherlock Holms y el dr. Watson, Vítebski se transformó en la estación Victoria de Londres.

Imagen de la estación a principios del siglo XX.

Para los pasajeros más distinguidos estaba la Suite del Gran Duque, que actualmente es la oficina del director de la estación. A pesar de nombre nunca albergó grandes duques. En realidad se llama así por el edificio anterior, que tenía una suite para el emperador y su comitiva.

Entre 1900 y 1901 se construyó un edificio separado para la familia imperial. Cuenta la leyenda que un cortesano de Nicolás II llegaba siempre cinco minutos antes que el zar para abrir el pabellón y preparar lo necesario para el viaje. En una ocasión vio que las puertas estaban abiertas y que el zar y sus hijas ya estaban en la plataforma. Nicolás, viendo el temor en sus ojos, le dijo que no había nada de lo que preocuparse porque había llegado a la estación 15 minutos antes de lo esperado.

En la Sala de la Luz (situada entre las salas de espera y la salida a la plataforma) se mantienen las vidrieras prerrevolucionarias, los arcos de hierro fundido y los azulejos alemanes de Villeroy & Boch. En 2007 se inauguró un monumento al ingeniero austriaco Franz Anton von Gerstner, que construyó la primera línea férrea. Fue él quien convenció al zar y a sus asesores de que Rusia necesitaba ferrocarriles. Sin embargo, muchos eran escépticos durante la construcción, que solo fue posible gracias al permiso del zar pero con dinero privado. ¿Podia Gerstner imaginar que en 1916, con la apertura del Transiberiano, Rusia iba a contar con la mayor línea de tren del mundo?

En un pabellón separado se puede ver una réplica de la primera estación de Tsarskoselski. Las locomotoras son de fabricación británica, de la planta Robert Stephenson and Company en Newcastle.

Hay visitas guiadas por la estación, pero solo en ruso. Charlamos con la holandesa Nienke van Poelje, que está estudiando la lengua. “Estoy realmente interesada en todo lo que tiene que ver con Rusia y no sea turístico. Me encanta relacionarme con rusos y conocer cosas más allá de la Plaza Roja y el Hermitage. Para mí, normalmente una estación de tren es un lugar al que voy con prisa, para subirme al tren. Nunca tienes tiempo para mirar al edificio”.

Aquí te mostramos las diez estaciones de tren más espectaculares de Rusia.

¿Quieres recibir la información más destacada sobre Rusia en tu correo electrónico? Pincha aquí y recibe cada viernes el material más interesante.

La ley de derechos de autor de la Federación de Rusia prohíbe estrictamente copiar completa o parcialmente los materiales de Russia Beyond sin haber obtenido previamente permiso por escrito y sin incluir el link al texto original.

Lee más

Esta página web utiliza cookies. Haz click aquí para más información.

Aceptar cookies