Distrito autónomo de Nenetsia
Los nenezos se acuestan en su tienda inmediatamente después de una abundante cena antes del importante día. Hay que descansar bien, el trabajo que hay que hacer por la mañana no es fácil: la manada de ciervos de cola blanca recorrerá 30-40 km hasta el mar.
Tan pronto como el sol aparece en el horizonte, la casa de la manada ya está en pleno proceso de preparación. Los nenezos cargan las motos de nieve con combustible y enganchan a los renos en trineos de madera ligeros. Sí, sí, los vehículos de transporte tradicionales siguen utilizándose aquí junto con la maquinaria moderna.
Parece que los huskies nenets, fieles ayudantes del pueblo, son los que más ganas tienen de trabajar. Esperando el inicio de la marcha, retozan de un lado a otro con sus ruidosos ladridos como animando: “¡Deprisa - guau-guau, deprisa! El sol se pondrá muy pronto. ¡Guau! ¡Guau!”
En general, es imposible acercarse a los nenezos sin ser descubierto: en cuanto el crujido de la nieve o el sonido lejano de una moto de nieve corriendo llega a los oídos de los vigilantes de cuatro patas, se elevan los ladridos amenazantes. A decir verdad, después de horas de conducción por la interminable tundra helada, no hay nada más alegre que ese sonido. Donde hay huskies, hay gente. Y donde hay gente, hay calor y comida.
Para quienes ven por primera vez esta raza aborigen de perros, los huskies nenets parecen bultos esponjosos creados para la simple belleza. Pero no saques conclusiones precipitadas. Salvo que los perros asumen el papel de vigilantes, participan en la caza y el pastoreo de renos a la par que las personas.
Mientras los nenezos en motos de nieve y trineos rodean a la manada principal y la conducen en una dirección determinada, algunos renos intentan escapar hacia el bosque (donde, por desgracia, un animal solitario morirá con total certeza). Es entonces cuando intervienen los huskies. Es sorprendente que un perro pueda atrapar fácilmente a un ciervo de las nieves y guiarlo hasta la manada. ¿Es un trabajo duro para un husky nenezo? No, ¡es sólo un juego y una diversión!
Cuando el invierno comienza a retirarse lentamente y el hielo de los lagos y pantanos cercanos a Narian-Mar está a punto de derretirse, los nenezos acercan sus numerosos rebaños de renos a la costa del mar de Bárents. Allí, durante la época estival, los fuertes vientos arrastran hordas de mosquitos que causan muchos problemas a las bellezas cornudas.
Para ver un reno de los nenezos se necesita un guía experimentado y la disposición de la población local para acoger a los huéspedes en un momento tan importante para ellos. Es fácil perderse en la tundra y no encontrar ni renos ni personas. Te aconsejamos que te pongas en contacto con el Centro Estatal de Turismo del Ártico (visitnao.ru), que te aconsejará sobre las fechas en las que puedes planificar dicha aventura y te informará sobre precios.