Óblast de Vólogda
El encaje de Vólogda no es sólo una bella artesanía y una tradición milenaria, sino un proceso hipnotizador, en el que la sinfonía de movimientos produce complejos patrones. Detrás de cada encuadernación, de cada lazo, hay años de estudio y trabajo duro.
A veces puede parecer que el patrón va demasiado lento, pero si uno da un paso atrás, verá que ya aparece un tallo o una hoja en la pieza y, al cabo de otra media hora, un copo de nieve.
Los adornos de encaje de Vólogda se inspiran en la naturaleza. Míralos de cerca y verás plantas extraordinarias, extraños seres vivos y, por supuesto, copos de nieve.
Detrás de cada producto hay un minucioso proceso de diseño. La artesana, a modo de ingeniera de diseño, debe desarrollar con precisión un dibujo, que luego se convierte en un entrelazado de decenas de hilos.
Enmarcados con una brada especial, una bobina, los copos de nieve se fijan firmemente al dibujo, como la escarcha permanente que se aprecia en las ventanas en febrero.
Los talleres para tejer auténtico encaje de Vólogda se imparten en un museo dedicado a este oficio. Está situado en el corazón de la ciudad, en el Kremlin de Vólogda.
Aquí, no sólo podrás observar el trabajo de experimentadas artesanas, ver las hábiles muestras del museo y comprar algo para ti, sino que también podrás probar tú mismo esta artesanía tan rara e interesante.
Agradecemos @lacemuseum por su participación y a @_vologdalace_ por las fotos y los vídeos cedidos a nuestro proyecto.