Meseta de Putorana: ¿quién creó este paisaje extraterrestre en el Ártico? (Fotos)

Viajes
ANNA SORÓKINA
Contempla un “planeta” de interminables valles y cañones perdidos más allá del Círculo Polar Ártico. También es donde se encuentra el centro geográfico de Rusia.

La meseta de Putorana, en el Taimir, es literalmente otro planeta. Está llena de fantásticos paisajes formados por numerosas colinas de cima plana plagadas de cascadas y profundos cañones. Y todo ello en la tundra ártica. ¿Qué ver en la meseta de Putorana? 

La meseta en sí es una enorme cadena montañosa de 250.000 km2, es decir, del tamaño de todo el Reino Unido, Nueva Zelanda o casi tan grande como Ecuador.

Se tardaría más de una vida en visitar todos los bellos lugares de la meseta. Aun así, hay algunas atracciones importantes que los turistas quieren ver.

La meseta alberga el centro geográfico de Rusia, el lago Vivi. Es el mayor lago de agua dulce de la región y los residentes incluso lo llaman el Baikal local. Tiene forma alargada: 90 km de longitud y 4 km en su parte más ancha. El lago está cubierto de hielo la mayor parte del año debido a las condiciones extremadamente frías. El agua se mantiene fresca incluso en julio.

La meseta de Putorana tiene la mayor densidad de cascadas del país. La cascada más alta de Rusia, Kandinski, es toda una cascada de saltos de agua que retumban río abajo.

No lleva el nombre del artista, sino el del río Kande, en el que desemboca. El caudal más alto de la "caída directa" es de 108 metros.

Un poco de misticismo. Periódicamente, a finales de diciembre o principios de enero, una estación meteorológica local registra círculos luminosos enroscados en espiral en el cielo, cerca de la cascada. ¿De qué se trata?

Una de las atracciones turísticas más accesibles (en relación con otras, claro) es el lago Lama, descubierto por pioneros a principios del siglo XX. Se puede llegar a él desde Norilsk en barco en sólo 5 horas. Es uno de los más profundos de Rusia, con más de 200 metros de profundidad. Y uno de los más pintorescos, por estar situado entre montañas y cañones.

Unos 19.000 km2 ocupa la Reserva Putorana, y cuenta con especies raras de animales (por ejemplo, ovejas de las nieves y renos salvajes) y paisajes de tundra únicos.

Huellas humanas

Está muy poco explorada hoy en día, y llena de lugares donde ningún hombre ha puesto el pie (según les parece a los contemporáneos). Sin embargo, a veces los viajeros encuentran cosas increíbles. Por ejemplo, hay vestigios de antiguos asentamientos evenki, así como antiguos objetos rituales (ídolos) y domésticos (narts). Son especialmente numerosos en la región de los lagos Lama, Mélkoie y Glubókoie.

Cabe mencionar como hallazgo inesperado dos vías férreas de 5 km de longitud. No está muy claro adónde conducían, cómo y por qué se construyeron, pero los investigadores de la meseta creen que pueden estar conectados con la ruta aérea de Alsib de los tiempos de la Gran Guerra Patria.

¿Cómo llegar a la Meseta Putorana?

A pesar de que es uno de los lugares más inaccesibles del continente euroasiático, muchos viajeros sueñan con llegar hasta aquí. Atrae tanto a excursionistas como a fotógrafos de fauna salvaje. 

La ciudad más cercana es Norilsk, a la que sólo se puede llegar en helicóptero o barco, mientras que algunos tramos son accesibles en vehículo todoterreno o a pie. Fuera de los asentamientos (a unos 30 km de la ciudad) prácticamente no hay conexión de telefonía móvil. Por supuesto, tampoco hay transporte público. Por lo tanto, lo más seguro es visitar Putorana formando parte de un grupo turístico. Recuerde que para visitar Norilsk y la meseta un extranjero tiene que obtener un permiso especial. Y si quiere visitar el territorio de la Reserva Natural de Putorana, también tiene que obtener un permiso.

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