Los vehículos no tripulados están ganando popularidad en los ejércitos de todo el mundo. Rusia los utilizan en una amplia gama de alturas, que van desde los 100 a los 5.000 metros.
Los drones militares de Rusia son muy variados, desde los “kamikazes” creados por Kaláshnikov, que tienen el objetivo de cambiar la forma de luchar en el siglo XXI, hasta el sofisticado Ojotnik, que es un dron pesado capaz de operar con armas utilizadas por el caza ruso de quinta generación, el Su-57.