La nueva corbeta del proyecto 20386 se unirá a la Flota rusa en 2022. Se trata de uno de los primeros barcos del país diseñado y construido para transportar los últimos misiles hipersónicos Zircón.
La principal tarea de los buques del proyecto 20386 será localizar y destruir los buques enemigos, tanto de superficie como submarinos. Además, se dedicarán a la protección de buques civiles y, en caso de que sea necesario, a dar cobertura a la infantería de marina con fuego de artillería durante un asalto en la costa.
“Las nuevas corbetas serán al menos un 15% más rápidas que sus predecesoras”, afirmó el diseñador jefe adjunto del proyecto, Alexánder Dadykin, a la televisión Zvezdá.
Lo conseguirá gracias a la nueva forma del casco, que permitirá al barco cortar las olas más suavemente y aumentar la velocidad por el uso de materiales compuestos.
También declaró que el buque contará con dos motores de turbina de gas con elementos de un motor eléctrico de próxima generación.
Se refiere a la modificación de la nave usando unidades Azipod, explicó una fuente en el complejo militar-industrial a Russia Beyond.
“El dispositivo se encuentra en una cápsula especial adherida al casco de la nave. Cuenta con un motor eléctrico adicional y una hélice que dirige el barco en cualquier dirección. De hecho, significa que el barco puede moverse tanto hacia la proa como hacia la popa. Esto significa que el monstruo de varias toneladas puede ser desplegado en un abrir y cerrar de ojos. Es un nuevo elemento que aumenta la maniobrabilidad del barco”, dijo la fuente a Russia Beyond.
La capacidad total del sistema energético supera los 55.000 caballos. “Esta es la primera vez en Rusia que se utilizan buques de clase corbeta”, dice Dadikin.
Gracias a tecnologías innovadoras, la corbeta del proyecto 20386 será un buque fundamentalmente nuevo en la Flota rusa.
También será el primer barco de la Flota rusa en tener un helicóptero Ka-27 con minas marinas a bordo bajo cubierta. El helicóptero se esconderá de la vigilancia enemiga y, si es necesario, se elevará a la cubierta a través de una rampa especial para su despliegue.
Según el diseñador, el Merkuri (Mercurio) será el primer barco “modular”, es decir, que los elementos del sistema de armas pueden ser reemplazados sin modificar significativamente la propia nave ni alterar su interior o sus módulos.
Al mismo tiempo, el arsenal del barco está diseñado para acomodar el armamento más moderno, tanto ofensivo como defensivo.
Potencia de fuego
Las corbetas del proyecto 20386 estarán equipadas con un par de baterías antibuque, cada una con cuatro lanzadores y ocho misiles. Se espera que sean de clase Zircón, los primeros misiles hipersónicos del mundo, con un alcance de hasta 500 km y una velocidad de Mach 8 (unos 2,5 km/s).
“Cabe señalar que los misiles aún no están en servicio en ningún país, excepto en Rusia. En la actualidad, no existen contramedidas eficaces contra ellos, lo que hace que el Zircón y sus portaaviones sean únicos”, dijo Dmitri Safónov, analista del periódico Izvestia, aRussia Beyond.
Según Safónov, también se instalarán en el buque cañones antiaéreos Redut, misiles Iglá y ametralladoras de seis cañones de 30 mm, capaces de perforar la armadura de los buques modernos.
“Para defenderse de los torpedos submarinos, se instalarán a bordo un par de cañones de calibre 330 mm. Y para los asaltos costeros, el barco tendrá un obús A-190 de 100 mm, que acribillará la costa con 80 disparos por minuto”, añadió Safónov.
En opinión del experto, ningún otro país posee una corbeta con una potencia de fuego comparable, lo que hace que los barcos del proyecto 20386 -y el Merkuri en particular- sean únicos.