La oficina de diseño TsNIITochMash (parte de la corporación estatal Rostec), el creador de la armadura de combate de infantería Rátnik-2 para el soldado ruso del futuro, ha comenzado a trabajar en un nuevo rifle de francotirador semiautomático para el Ministerio de Defensa ruso. El proyecto Ugoliok, como se le conoce, se está desarrollando al mismo tiempo que la munición calibre .308 Winchester y .338 Lapua Magnum de la OTAN.
Una característica importante del nuevo rifle es la total ausencia de componentes fabricados en el extranjero, en primer lugar, su munición.
Los calibres Winchester.308 y Lapua Magnum.338 corresponden a las balas de francotirador más utilizadas en el mundo. Los mejores Ejércitos del mundo las usan en sus rifles de francotirador durante el desarrollo de operaciones especiales, incluso en Siria.
Y mientras que, hasta hace poco, la munición de los francotiradores rusos se compraba en el extranjero, ahora la tarea consiste en fabricar nuevas balas en Rusia, ya que serán las que se empleen en los nuevos rifles del Ejército ruso y las que se disparen con ellos.
Paralelamente, TsNIITochMash tendrá que desarrollar accesorios y nuevas miras para sus futuros rifles de francotirador.
Por cierto, la empresa se enfrenta a un sólido competidor en el mercado de rifles semiautomáticos de francotirador para el Ejército ruso: la Corporación Kaláshnikov que presentó un posible sustituto del SVD soviética a mediados de 2018.
Lee más sobre esta nueva creación y lo que el presidente ruso Vladímir Putin opina sobre el rifle en cuestión pinchando aquí.