Imagínate que estás viendo una película ambientada en un bosque. Entonces sientes cosquilleando tus fosas nasales el delicado aroma del musgo, las flores y el resto de la vegetación. Esta es la idea que está desarrollando actualmente la empresa rusa Illusion, informa el periódicoVédomosti.
La empresa, que cuenta con un equipo de especialistas que han ganado numerosos concursos en el campo de la tecnología y las start-ups, está desarrollando un dispositivo capaz de sintetizar y rociar olores según las diferentes escenas de una película que se esté proyectando. Los aromas se producirán mediante cartuchos recambiables y, aunque inicialmente los diseñadores programarán su difusión de antemano para que coincida con el entorno presentado en la pantalla, del mismo modo que la banda sonora se superpone a la imagen, su ambición es desarrollar más adelante una inteligencia artificial capaz de reconocer los objetos que aparecen en la propia película y emitir los olores adecuados en el momento oportuno.
Entre los principales aromas ya anunciados están el café y la bollería recién horneada.
En cuanto al coste de dicho aparato, se estima en 50.000 rublos (569 euros). La empresa también tiene previsto equipar pequeños cines con estos dispositivos, así como ofrecerlos en alquiler.
Para finalizar este proyecto y proceder a la producción en serie, Illusion cuenta con 20 millones de rublos (227.712 euros) de financiación del programa Iniciativa Tecnológica Nacional (ITN), que apoya proyectos técnicos prometedores, y una cantidad equivalente de inversores privados.
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