1. ‘Ushanka’
Hoy en día, es uno de los suvenires más populares de Rusia, uno de los pocos que quizás pueda competir con la muñeca matrioshka en este aspecto. De hecho, hay muchos tipos diferentes de gorros en Rusia (lo que no es sorprendente, dado su clima), pero las ushanki han creado un culto especial a su alrededor.
Este grueso y cálido gorro ruso ha sufrido numerosas modificaciones y cambios de estatus. Al principio, era usado por los campesinos de Rusia. A principios del siglo XX, la ushanka formaba parte del uniforme del Ejército Blanco, que luchaba en defensa del zar. Luego, en la década de 1930, pasó a formar parte del uniforme del Ejército Rojo soviético.
La ushanka tuvo a su mayor admirador en el líder soviético Leonid Brézhnev. No es de extrañar que muy pronto se popularizara entre las masas y la élite del Partido Comunista, por igual. Las orejeras se usaban como monedero (se podía guardar dinero allí), y estos caros gorros se guardaban en la nevera, para conservar mejor la piel.
Dónde vestirla: de hecho, en cualquier parte, pero particularmente en Siberia Occidental y Oriental. Un gorro ushanka te ayudará a sobrevivir a cualquier invierno.
2. ‘Kokóshnik’
En la vieja Rus, las mujeres no usaban sombreros. Los sombreros eran para los hombres, mientras que las mujeres tenían su propio tipo de prenda para cubrir la cabeza, el kokóshnik, una tiara tradicional rusa hecha de tela (a veces se usaba junto con una bufanda que cubría la cabeza, el cuello y los hombros). Según la tradición, sólo las mujeres casadas podían usar un kokóshnik.
Hay muchos tipos de kokóshnik ya que casi todas las regiones de Rusia tienen su propia versión de este popular tocado. Por cierto, bajo el gobierno de Pedro I el Grande, se prohibió que las mujeres aristocratas lo usaran. El zar quería que Rusia adoptara las modas europeas, por lo que se esperaba que las mujeres llevaran vestidos con escote (lo que debió ser un duro golpe para las mujeres casadas).
En la década de 1920, la “tiara rusa” se puso de moda en Europa (por ejemplo, la esposa de George V, María von Teck, llevó un kokóshnik en su boda). Desde entonces, este tipo de tocado ha sufrido numerosas transformaciones.
Dónde vestirlo: en un concierto (si eres una estrella del rock como Courtney Love); en un partido de fútbol, si apoyas a la selección rusa; en una fiesta, como accesorio de moda.
3. ‘Válenki’
Se trata de las tradicionales botas de fieltro rusas, que durante siglos han sido un elemento esencial del vestuario de los rusos. Esto, sin embargo, no significa que al salir a dar un paseo por Moscú en medio del invierno, se pueda ver gente luciendo válenki. Hoy en día, estas botas de fieltro están reservadas para las condiciones climáticas más extremas. Pero, por ejemplo, en algún lugar de un pueblo siberiano sería difícil salir a la calle sin tus válenki puestas, o la nieve estará inmediatamente dentro de tu frágil calzado de ciudad.
Por cierto, hasta el siglo XVIII, los válenki sólo se fabricaban en Siberia y en otras regiones del norte. El resto de Rusia se dio cuenta de la grandeza de este invento más tarde. Hoy en día, válenki forman parte del uniforme de los que trabajan en la industria del petróleo y el gas y en el ferrocarril.
Dónde vestirlos: en cualquier parte donde haga frío y haya mucha nieve.
4. Caftán
¡Esta es la piedra angular del vestuario masculino en Rusia! A partir del siglo X, sólo la llevaban los miembros de las clases privilegiadas, pero con el paso del tiempo el caftán de “élite” evolucionó hasta tal punto que incluso los barrenderos comenzaron a usarlo...
De hecho, el caftán no es un invento ruso. Los rusos lo tomaron prestado de los antiguos persas. Parecido a un abrigo, resultó ser apto para todo tipo de hombres: añadía peso a los delgados, solemnidad a los que tenían sobrepeso e importancia a los que parecían insignificantes. Existe la teoría de que todos los demás tipos de ropa exterior de Rusia derivan del caftán.
Dónde vestirlo: es, en cierto modo, una alternativa a un traje, por lo que puede intentar llevarlo puesto en una reunión de negocios (o mejor no).
5. Mantón ruso
Hay docenas de maneras de usar un pañuelo ruso (o chal) y no parecer una persona del milenio pasado. Sí, el mantón ruso tiene siglos de antigüedad, pero su producción es una artesanía tradicional que sigue siendo floreciente (en gran parte, gracias a diseñadores modernos como Denís Simáchiov). Los pañuelos rusos se producen en Orenburgo, en la región de Moscú, en los Urales, en Vólogda y en otros lugares. Sin embargo, no hay que olvidar que todos se basan en la misma artesanía rusa antigua, que puede tardar toda una vida en aprenderse.
Dónde vestirlo: en la ciudad, en primavera y otoño ya que estas pañuelos también son muy cálidos. Te servirán como sombrero y bufanda, todo a la vez.
6. Uniforme escolar
En la Unión Soviética, los niños tenían su propio uniforme escolar especial. Para los niños, un traje oscuro, casi militar, y para las niñas, un vestido marrón con un delantal negro o blanco. Como regla general, el uniforme tenía un accesorio adicional, una corbata roja de pionero, que marcaba la pertenencia de los niños a la organización comunista.
Aunque la idea de un uniforme escolar se remonta a la Rusia zarista, es la versión soviética la que se ha vuelto kitsch en la Rusia moderna.
El uniforme escolar fue abolido en Rusia en 1994, como reliquia de la época soviética, pero algunos niños de hoy en día se lo ponen para su ceremonia de graduación (sin que haya en ello, por supuesto, ningún sentimiento nostálgico por la escuela de la era soviética). Del 24 al 26 de mayo, en cualquier ciudad de Rusia se pueden encontrar chicas adolescentes vistiendo sus delantales blancos.
Dónde vestirlo: en un baile de graduación en Rusia o una fiesta de Halloween. Hoy en día, este uniforme está disponible en cientos de tiendas de Internet.
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