Los rusos creen que la crema agria, el yogur y el kéfir hacen que la piel roja seca se suavice y alise. Los productos lácteos contienen gran cantidad de ácidos lácticos, excelentes no sólo para regenerar la piel dañada, sino también para suavizar las arrugas. Se cree que el yogur contiene vitaminas y oxígeno, lo que estimula el crecimiento de nuevas células. No te sorprendas si ves a un hombre frotándose con crema agria...
En el país eslavo se usan claras de huevo, decocción de ortiga o jugo de sandía para ayudar a reducir el dolor de las quemaduras de sol. ¿Cómo funcionan? Cada uno de estos tres remedios contiene gran cantidad de minerales y proteínas. Matan los microbios, que producen venenos, y previenen la propagación de la infección. La decocción, el jugo y las claras de huevo crudas se deben poner directamente sobre la quemadura con un cepillo o con unas vendas.
Los rusos suelen utilizar aceite de espino amarillo. Gracias a la alta concentración de betacaroteno y antioxidantes, protege de los rayos ultravioletas. La contracción de los poros y el aclarado de la piel son agradables efectos secundarios de la aplicación de este aceite.
Según la medicina rusa tradicional, la patata fresca, la zanahoria y la calabaza son como una bendición para la picazón de la piel. Se pueden usar tanto pedazos como el puré de estas verduras, los ácidos naturales que contienen actuarán como si fueran mágicos.
El chucrut no sólo es un aperitivo crujiente y picante, sino que también combate el edema. La col es un auténtico tesoro de vitaminas y microelementos, que sirven para reanimar la piel. Por lo general, los rusos ponen un poco de chucrut en un saquito hecho de gasas y lo dejan en la parte dañada durante 15-20 minutos. El único problema es que después hueles a repollo.
Disuelve una cucharada de sosa cáustica en un vaso de agua. Sumerge un pedazo del vendaje en la mezcla y luego colócalo en la zona lesionada. Repite esto seis veces durante tres días para ayudar a que su piel se reanime después de una quemadura solar.
Pon un puñado de avena en un plato hondo y vierte un poco de agua tibia. Deja reposar durante media hora. Utiliza esto como crema durante aproximadamente dos días, cada vez que te duela la quemadura.
Mezcla diez gotas de jugo de limón con 100 mg de crema agria para preparar una mascarilla. Aplícalo y déjalo colocado durante diez minutos. Después, relájate y come frutas como kiwi, naranja, piña o fresas, todas ellas con un montón de vitaminas. Se trata de una manera sencilla de reanimar la piel de tu cara y de mimarte.
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