Evgueni Ches es un artista con base en Moscú y un gran fan de CelloGraff, un nuevo tipo de grafiti. En vez de pintar con spray las paredes de los edificios esta técnica utiliza como lienzo un pedazo de celofán colocado entre dos árboles.
“En un momento dado comencé a pintar sobre un plástico. Vi en Internet cómo dos tipos franceses pintaban sobre un plástico en la ciudad, así que decidí intentarlo. Estaba interesado”, comenta a Russia Beyond el artista. “Inmediatamente me vino la idea de hacer mis grafitis en una lona de plástico en la naturaleza, no en la calle. Pensé que podría convertirse en una fotografía muy interesante, en el que el estilo urbano estaría en armonía con los paisajes naturales”.
La idea de representar animales vino por su objetivo de hacer su trabajo más comprensible a todo el mundo y no solo a aquellos interesados en el grafiti.
En ocasiones el artista tiene que dar paseos de hasta tres horas para encontrar el lugar perfecto para colocar su cellografiti. Aunque Evgueni no pinta en el bosque y tampoco deja ahí su arte. Lo desmonta para no contaminar.
“El cellografiti es algo que está bien porque puedes crear rápidamente una pared en el lugar que necesites”, explica. “Puedes pintar mientras meriendas con los amigos (no te olvides de recoger el plástico) o un joven artista puede pintar con spray en el jardín de su casa”.
Estos animales parecen muy reales, pero ¿sabías que hay pinturas tan realistas que no se distinguen de una fotografía?