La revista estadounidense Popular Mechanics calificó en una ocasión al V-12 soviético (nombre de la OTAN: “Homer”) como “triunfo de la ingeniería”. Era el helicóptero más grande jamás construido en el mundo. La principal peculiaridad del helicóptero soviético V-12 (también conocido como Mil Mi-12) consistía en dos únicos rotores transversales de régimen que eliminaban la necesidad de un rotor de cola. En 1969, esta máquina levantó 44.205 kg a una altitud de 2.255 metros, batiendo un récord mundial que sigue vigente. Pero el destino quiso que su superpotencia quedara prácticamente sin uso.
La Unión Soviética construyó este gigantesco helicóptero a finales de la década de 1960 para transportar por aire misiles balísticos intercontinentales a bases militares sin tener que recurrir al ferrocarril (se considera que en aquella época la red ferroviaria de la URSS no estaba tan bien desarrollada y además estaba vigilada constantemente por aviones de reconocimiento U-2 estadounidenses).
En consecuencia, los diseñadores soviéticos propusieron crear un helicóptero superpesado que pudiera transportar misiles nucleares a bases remotas, manteniéndolas en secreto de la fotointeligencia estadounidense.
Según Rossíiskaia Gazeta, el proyecto se aprobó en 1962 y el V-12 realizó su primer vuelo en 1968. Fue probablemente el primer helicóptero del mundo con hélice transversal.
Era más largo y espacioso que el Boeing 747. Utilizaba los motores de dos helicópteros Mi-6 más pequeños para lograr transportar el doble de carga útil.
El V-12 podía transportar 196 pasajeros o casi 40 toneladas de carga. El compartimento de carga medía más de 28 metros de largo, más de 4 metros de alto y más de 4 metros de ancho, por lo que era lo suficientemente grande como para llevar de un lado a otro incluso autobuses urbanos, y con facilidad. La cabina tenía capacidad para seis tripulantes, incluido su propio electricista.
Según el diario ruso, el V-12 hizo su debut internacional en el Salón Aeronáutico de París de 1971.
La OTAN temía que se utilizara como aeronave táctica que pudiera transportar vehículos blindados para apoyar los ataques con helicópteros. Pero nunca llegó a poner en práctica su potencia.
Los expertos afirman, que para entonces, los satélites espía estadounidenses ya eran capaces de vigilar zonas mucho más amplias del territorio soviético. Por otro lado, los misiles balísticos intercontinentales se hicieron gradualmente tan ligeros que podían ser transportados en camiones. Además, las nuevas tecnologías permitieron a los misiles balísticos intercontinentales llevar múltiples ojivas. Esto aumentó enormemente la potencia de fuego de cada misil y redujo la necesidad de nuevas bases fijas de misiles. Tampoco era necesario ya transportarlos por vía aérea.
Al final solo se produjeron dos helicópteros de este tipo pese a las excelentes críticas y los prestigiosos premios internacionales que recibió, entre ellos el Premio Sikorski.
Síguenos en nuestro canal de Telegram: https://t.me/russiabeyondes
LEE MÁS: Récords establecidos por helicópteros rusos (Fotos)