Alexeiev SM-6, el aparato experimental del que surgió el ekranoplano de asalto ‘Orlionok’

Rostislav Evgenievich Alexeiev (1916 -1980) fue un director y jefe de diseño soviético ruso conocido por su trabajo pionero en buques hidroplanos y vehículos de efecto suelo. Alexeiev fue un consumado diseñador de barcos hidroplanos, como el Raketa y se convirtió en un destacado desarrollador de vehículos de efecto suelo conocidos como ‘ekranoplanos’, en particular el del famoso Monstruo del Mar Caspio y el A-90 ‘Orlionok’.

En 1972, la Oficina Central de Diseño de Hidroplanos (TsKB SPK) de Sormovo, dirigida por R.E. Alexeiev, diseñó y construyó el aparato de efecto pantalla experimental SM-6, ideado para la investigación de la aerodinámica, la hidrodinámica y la resistencia, así como a probar soluciones técnicas para ekranoplano de transporte pesado ‘Orlionok’, desarrollado posteriormente sobre su base.

El sistema de propulsión constaba de tres motores: un motor de propulsión AI-20 instalado en la quilla y dos motores turborreactores de elevación para facilitar el despegue.

Este ekranoplano, como explica la web especializada Airwar.ru, estaba hecho de acero y aleación AMG-61, que ofrecía protección contra la corrosión y un revestimiento especial y protector electroquímico.

Síguenos en nuestro canal de Telegram: https://t.me/russiabeyondes 

Estimados lectores,
Nuestro sitio web y nuestras cuentas en las redes sociales corren el riesgo de ser restringidos o prohibidos, debido a las circunstancias actuales. Por lo tanto, para mantenerte al día con nuestros últimos contenidos, simplemente haz lo siguiente:

Suscríbete a nuestro canal de Telegram: https://t.me/russiabeyondes

• Suscríbete a nuestro boletín semanal por correo electrónico: debajo de cada artículo hay un espacio para hacerlo.
• Habilita las notificaciones push en nuestro sitio web.
• Instala un servicio de VPN en tu ordenador y/o teléfono para tener acceso a nuestra web, aunque esté bloqueada en tu país.

LEE MÁS: Tecnología olvidada: Así volaba el ekranoplano Orlionok, la ‘pequeña águila’ soviética