Ingenieros rusos han creado un dispositivo que se abre con una red en el aire para atrapar objetivos aéreos de pequeño tamaño. Se espera que los primeros prototipos se presenten al público a mediados de 2021 durante la exposición militar Army-2021 en las afueras de Moscú.
“Este misil está siendo desarrollado por el Centro Federal Nuclear de Rusia. Se trata de una estructura especializada en la resolución de problemas científicos y técnicos relacionados con la garantía y el mantenimiento de la fiabilidad y la seguridad de las armas nucleares. Así que podría recibir algunas tecnologías nucleares”, afirma el analista militar Dmitri Safonov.
El sistema consiste en un misil con guía láser, que se acerca a un dron con un contenedor con una red trampa en su interior. En el momento en que la IA reconoce un vehículo aéreo no tripulado, abre la red y atrapa al “enemigo vivo”, asegurándose de que el propietario del dron pierde la señal.
Los creadores señalan que son eficaces para atrapar vehículos aéreos no tripulados de alta velocidad capaces de realizar maniobras complejas.
El sistema funciona de la siguiente manera: un misil irá volando y escaneando el territorio que se encuentra debajo. Una vez que detecta un objetivo aéreo enemigo, baja abriendo la red.
Los científicos planean aumentar las capacidades del misil, su velocidad inicial y su capacidad de carga en los próximos meses antes de su presentación.
Según sus creadores, esta tecnología es única y no tiene análogos en el mercado, ya que las empresas se concentran sobre todo en cegar drones con medios de guerra radioelectrónica o mediante la creación de cañones antidrones.
Armas rusas modernas contra drones
El Consorcio Kaláshnikov es el líder del mercado ruso de armas en el desarrollo de fusiles antidrones. Su arma principal se llama REX-1 y está siendo probada en las unidades de la Guardia Rusa antes de ser adoptada por los militares.
“Esta 'pistola' radiomagnética suprime los canales de mando y control de los drones más comunes del mundo. También lleva instaladas varias unidades electromagnéticas e infrarrojas intercambiables que suprimen los canales GSM, GPS y otros”, explica Nikita Jamitov, jefe del departamento de proyectos especiales del Grupo Zala Aero, la empresa que ha desarrollado la nueva arma y que forma parte del Consorcio Kaláshnikov.
Una persona puede cambiar la batería del arma en cuestión de segundos. Cada una de ellas proporciona al usuario "cuatro horas de disparo continuo.
Después, el artillero puede recargar el arma durante cuatro horas utilizando un enchufe normal de 220 voltios, o conectar una batería adicional y continuar la batalla.
“Una característica particular del dispositivo es la posibilidad no solo de neutralizar vehículos aéreos no tripulados, sino también artefactos explosivos activados por control remoto, mediante una llamada telefónica o un mensaje de texto, como se ve en las películas. El cañón apaga todas las señales externas y da tiempo al grupo de ingenieros de combate para llegar al lugar y eliminar por completo la amenaza”, concluye Jamitov.
LEE MÁS: Ya está en marcha el segundo prototipo de dron pesado Ojotnik... y será muy diferente