Alexánder Krasovitski, director de la Compañía Militar Industrial de Rusia (VPK), declaró en el canal central de la televisión, el pasado día 4, que ya está en marcha la creación de un nuevo tanque anfibio ligero, aunque todavía carece de nombre.
El proyecto tiene todavía un estatus “tentativo” y cuando el Ministerio de Defensa reciba las pruebas correspondientes, entonces decidirá si continúa o no con la producción en cadena de los vehículos.
¿Necesita Rusia un nuevo tanque?
El nuevo aparato se basará el vehículo de transporte de personal Bumerang, que se mostró al mundo por primera vez durante el Desfile de la Victoria, celebrado en la Plaza Roja el 9 de mayo de 2015.
El nuevo tanque basado en el Bumerang estará equipado con un cañón de 125 mm. Tendrá capacidad anfibia gracias a sus potentes motores de propulsión, capaces de desplazar el vehículo de varias toneladas a 12 km/h bajo el agua.
Vladímir Yevséiev, experto militar y vicedirector del Instituto de los países de la CEI, duda de que el proyecto sea realizable y de la necesidad de Rusia de contar con este nuevo aparato.
“A principios de la década de 2010 hicimos pruebas de tanque con los vehículos ligeros italianos Centauro, que tienen un chasis similar con ruedas. Pero el equipamiento es apto para Europa, con sus buenas carreteras y paisajes planos, pero no es nada adecuado para nuestro país”, explica el experto.
Estos vehículos tienen problemas de equilibrio, señala.
Según el experto militar de TASS, Víktor Litovkin, estos vehículos son ideales para los ejércitos europeos ya que el chasis con ruedas les permite desplazarse fácil y rápidamente a través de largas distancias por buenas carreteras con armas pesadas.
“Es más fácil mover estos vehículos por carreteras ideales que cargar los tanques en un trailer o desplazarlos miles de kilómetros por tren. Es el doble de caro y lleva más tiempo”, considera el experto.
En cualquier caso, la decisión final depende del Ministerio de Defensa, a quien hay que presentarle todavía el tanque de manera adecuada.
“El Terminator 2, el vehículo de apoyo a la infantería, que actualmente alaban todos los medios, tanto en Rusia como en el extranjero, pasó 20 años en los estudios de Uralvagonzavod antes de que los miembros de la compañía persuadieran a los militares de su utilidad y de la necesidad que tenían en las modernas condiciones de combate. Por alguna razón todo el mundo creía que en las guerras del futuro los únicos que iban a ser indispensables eran los misiles”, comenta una fuente del complejo industrial militar a Russia Beyond.
Sin embargo, considera como una tendencia positiva y un correcto desarrollo del negocio, la aparición de nuevos intentos y de polémicos diseños.
“En el desarrollo de nuestro sector de defensa hemos alcanzado un punto lógico por el cual el dinero del presupuesto no se gasta inconscientemente en proyectos que vaya usted a saber lo que son, sino en el desarrollo de modelos específicos que han demostrado ser solventes y que son necesarios para el ejército”, declaró la fuente a Russia Beyond.
Cómo era el predecesor de este nuevo tanque
El Bumerang, que será la base sobre la que se desarrolle el nuevo tanque, remplazó a los “viejos” de la infantería rusa, el vehículo de transporte de personal BTR-80 y su versión modificada, el BTR-82. Este último fue criticado por los militares debido a la escasa protección en el suelo del vehículo.
“Había que eliminar ese inconveniente, así que el nuevo Bumerang recibió un blindaje de varias capas con elementos de cerámica, similar al blindado de algunos tanques. Además, los diseñadores han colocado el motor en la parte delantera del vehículo para aumentar la protección ante los fuegos frontales y las minas. Es significativamente más grande que los modelos precedentes y el espacio para la tripulación ha aumentado”, comenta la fuente a Russia Beyond.
Además, la principal diferencia del Bumerang con los diseños soviéticos es su diseño modular.
“Eso significa que una torreta puede remplazarse fácilmente por otra que tenga un armamento diferente, dependiendo de las tareas y las condiciones específicas de combate. Al mismo tiempo, la torreta actual no está pilotada y funciona por control remoto, lo que aumenta considerablemente la supervivencia de la tripulación”, añade la fuente.
En la torreta hay una metralleta de 7,62 mm con una capacidad de tiro de 2.000 disparos, así como un sistema de misiles Kornet, de guiado automático, que pueden dar en el blanco a objetivos situados a distancias entre 150 m y 10.000 m.
Estos todoterrenos rusos pueden con todo. No te quedes sin conocerlos.
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