Obama y Putin tras hablar en la cumbre de APEC en Lima el 20 de noviembre.
AFP/East NewsLa cumbre del APEC que tuvo lugar en Lima el pasado fin de semana estuvo marcada por las recientes elecciones presidenciales en EE UU. El presidente electo Donald Trump ha recalcado en repetidas ocasiones la necesidad de cooperar con Rusia- Esto contrasta con las duras declaraciones y medidas emprendidas por la administración de Obama contra Moscú, la elección de Trump añadía interés a los posibles contactos entre el presidente Obama y Putin en la capital de Perú.
El primer día de la cumbre, Dmitri Peskov, secretario de prensa de Putin, declaraba que no se preveía ninguna reunión especial entre los presidentes de Estados Unidos y Rusia, pero que ambos líderes podrían encontrarse en uno de los eventos generales planeados para todos los líderes de los países del APEC. Lo que tuvo lugar el sábado, lo que probablemente fue la última conversación entre ambos líderes en sus puestos actuales.
El encuentro duró varios minutos, durante una de las asambleas de la cumbre. Al poco tiempo en internet se publicó un video de la conversación. Según informaba Putin durante una rueda de prensa tras la cumbre, a pesar de que durante los últimos años el diálogo entre ellos no ha sido fácil, ambos presidentes se han mostrado siempre un profundo respeto. Putin agradeció a Obama “estos años de trabajo conjunto” y aseguró que le gustaría verlo en Rusia si algún día decidía hacerle una visita.
Por su parte, Obama informó que ha instado a Putin a trabajar para cumplir los acuerdos de Minsk sobre Ucrania con el objetivo de alcanzar un progreso antes de finalizar su mandato en la Casa Blanca en enero de 2017. Obama también expresó a Putin la necesidad de instaurar un alto el fuego humanitario alrededor de la ciudad siria de Alepo para poder iniciar una transición hacia la regulación política.
Además del encuentro con Obama, Putin celebró otras reuniones más prolongadas y completas con otros líderes de la región. Entre estos encuentros, destacan los que mantuvo con los líderes de Japón y Filipinas.
Las negociaciones con el líder japonés sorprendieron por la calidez presente en la comunicación entre ambos: tanto Shinzo Abe como Putin se trataron de tú. El mandatario japonés habló sobre la próxima visita de su homólogo ruso en diciembre. Abe prometió recibir a Putin en un hotel con aguas termales. Se espera que uno de los temas principales de la visita de Putin serán las nuevas propuestas de Tokio respecto a las islas Kuriles.
En Lima Putin se reunió por primera vez con el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, conocido por sus escandalosas declaraciones. En esta ocasión, sin embargo, el presidente filipino no se permitió ninguna salida de tono, y se limitó a alabar las cualidades de liderazgo de su interlocutor y a criticar a los países occidentales por intentar intimidar a los pequeños países, acusándolos de hipócritas.
Según Glev Ivashentsov, especialista en países de la región Asia-Pacífico de la Academia Presidencial Rusa de Economía Nacional y Administración Pública, la reunión con Duterte es un acontecimiento importante, ya que en Filipinas, que anteriormente se encontraba en el ámbito de influencia de EE UU, ahora declaran su intención de establecer contactos con China y Rusia. El experto recuerda en una entrevista para RBTH que este país, con sus 100 millones de habitantes, es un importante mercado.
Según Ivashentsov, la reciente cumbre del APEC ha sido especialmente importante para desarrollar esta tendencia. Ello se debe a que el futuro del proyecto estadounidense del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TTP) por ahora está en el aire: Donald Trump declaró en campaña que no apoyaba el proyecto. En este contexto surgen nuevas posibilidades para desarrollar una zona de libre comercio del APEC. Moscú es partidaria de este último, ya que en el TTP no contaban con ella.
En Lima Putin hizo sus primeras declaraciones sobre el escándalo del arresto del ministro Alexéi Uliukáiev, acusado de aceptar sobornos. El presidente ruso calificó el asunto de “triste noticia”, aunque declaró que esto no solo no dañará el clima de los negocios del país (según temen algunos analistas), sino que lo reforzará.
Putin también declaraba que el arresto de Uliukáiev no influirá de ningún modo en su relación con el gobierno ni en la situación de la mayor petrolera de Rusia, Rosneft, que también está implicada en el caso. Continuando con el tema del petróleo, Putin declaró que Rusia está dispuesta a congelar los volúmenes de extracción de petróleo si los países de la OPEP llegan a este acuerdo.
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