Los eslavos conforman el mayor grupo etnolingüístico de Europa. La inquietud por saber con certeza de dónde provienen es un campo de estudio y debate común entre los antropólogos, lingüistas, arqueólogos e historiadores, ya sean eslavos o no. Los eslavos, al ser también indoeuropeos, deben ser de un profundo interés de cualquiera que se interese por esclarecer los orígenes del resto de pueblos que habitan Europa y, por consiguiente, cualquiera que se interese en complementar las investigaciones sobre nuestro propio origen.
La hipótesis de los kurganes: el Urheimat más aceptado
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Hasta el momento, la hipótesis del pueblo protoindoeuropeo común más extendida es la hipótesis de los pastores seminómadas de las estepas, descendientes de la mezcla genética de cazadores-recolectores de Europa del Este y del Cáucaso norte. Asumiendo esta hipótesis, llamada la hipótesis de los kurganes o de las estepas euroasiáticas, sistematizada por la reconocida antropóloga de origen lituano Marija Gimbutas, la cultura yamna, perteneciente al final de la Edad de Cobre y al comienzo de la Edad de Bronce, sería el nexo de unión de todos los indoeuropeos. Es lo que se conoce como Urheimat, la patria o lugar de origen lingüístico.
Los yámnaya eran un pueblo seminómada estepario, y está demostrado que llegaron hasta la Península Ibérica y reemplazaron a la mayoría de los hombres ibéricos que hasta entonces la habitaban. ¿Cómo se explica este gran dominio por parte de un pueblo proveniente de las estepas rusas y ucranianas? A nivel tecnológico, los yámnaya contaban con una gran ventaja: la rueda, que fueron exportando a los lugares conquistados. El uso de carros les permitió asimismo contar con mayores rebaños, lo que permitió un desarrollo considerable. Además, la domesticación del caballo también les permitió expandirse a una escala muchísimo mayor que sus contemporáneos. Los yámnaya que fueron teniendo descendencia en los territorios europeos que iban ocupando llevaban consigo una genética responsable de la piel blanca y una mayor altura, así como una mayor tolerancia a la lactosa. Así pues, y siguiendo la teoría de Gimbutas, los yámnaya son los antepasados que nos unen con cualquier persona de origen indoeuropeo.
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Una vez presentada la principal hipótesis del Urheimat indoeuropeo, que atañe tanto a un ruso como a un español, vamos a acercarnos a las principales culturas arqueológicas que sirven como las hipótesis más destacadas, en referencia al lugar primigenio de los eslavos.
La cultura de las ánforas globulares
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La cultura de las ánforas globulares (Kugel-amphoren) tiene como principal característica, además de las ánforas de forma globular que le dan el nombre, el hallazgo de numerosos túmulos y la fabricación de hachas de piedra. Fue una de las culturas adyacentes de la cultura de Cerámica Cordada. Enterraban a los animales (especialmente bovino ganado) junto con ofrendas, y es posible que practicaran el rito del satí (inmolación de la mujer en la pira funeraria del recién fallecido marido), hasta hace no mucho practicado en la India. Se cree que la cultura de las ánforas globulares es una de las muestras de la segunda ola migratoria indoeuropea.
La cultura Zarubintsy
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La cultura Zarubintsy abarcaba la zona norte del mar Negro. Hallazgos arqueológicos corroboran que la cultura Zarubintsy estaba influenciada por la cultura de la Tène, por los escitas y por los sármatas. Además, se sabe que comerciaban con la piel de animales salvajes con otros pueblos del mar Negro y que practicaban la cremación, depositando las cenizas junto a adornos, como brazaletes en espiral, y fíbulas. Se cree que la población fue abandonando el sitio original en las colinas por causa del árido clima, trasladándose junto a los valles de los ríos. Los sitios centrales de la cultura Zarubintsy dieron lugar a la llamada cultura de Kiev, mientras que los sitios occidentales impulsaron la cultura de Wielbark.
La cultura Oksywie
Situada en la actual Polonia, fue también influida por la cultura celta de La Tène y se cree que guarda relación con el, una vez existente, idioma báltico de Pomerania. Sabemos que la cultura Oksywie estaba estrechamente unida con la cultura Przeworsk, gracias a hallazgos arqueológicos funerarios que incluyen objetos destinados a ser usados en el más allá o espadas de un solo filo en las tumbas de los hombres, cuyas cenizas se guardaban en urnas negras finamente decoradas, y objetos de uso femenino en los huecos donde se enterraban las cenizas de las mujeres.
La cultura lusaciana
La cultura lusaciana es predecesora de la cultura Trzciniec (caracterizada por el uso de tumbas planas) y antecesora de la cultura pomerania. Su nombre hace referencia a Lusacia, cuyo significado es “lugar de prados pantanosos”, una región situada entre Alemania y Polonia. Si bien formó parte de una teoría muy popular en los años 30 del siglo pasado (a raíz del descubrimiento de la ciudad de Biskupin) para identificar a los primeros eslavos, a día de hoy la cultura lusaciana vista como lugar primigenio de los eslavos es una idea que no cuenta con gran apoyo por parte de los investigadores.
Cultura de Cherniajov
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La cultura de Cherniajov o cultura de Sântana de Mureş ocupaba gran parte de Europa del Este, comprendiendo las actuales Rumanía, Moldavia y Ucrania. Fue la predecesora de la cultura de Zarubintsy y la antecesora de la cultura de Penkovka. Se asume como cultura compuesta por elementos multiétnicos: iranios, tracios, germánicos y eslavos. Su camino los separó del conjunto baltoeslavo relacionado a los vénedos que menciona Tácito, situados en Bielorrusia occidental, debido posiblemente a un mayor desarrollo tecnológico y militar. La cultura de Cherniajov, predominantemente goda y de la que se tienen constancia hasta 2.700 sitios, no funcionaría como una patria eslava exclusiva. Los hallazgos muestran que, en un momento dado, cuando los hunos llegaron, se produjo una despoblación masiva, con emigración hacia las fronteras del Imperio romano. Fue entonces cuando el área de Cherniajov fue sustituida por cada vez más abundante población eslava. Más adelante, fueron ocupando territorio en Europa central, sustituyendo a los antiguos pobladores germanos. Jordanes, historiador romano, los bautiza como antas y esclavenos. En la época soviética, se intentó asociar la cultura de Cherniajov con los orígenes eslavos.
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