José De Ribas, el español que fundó Odessa para Catalina la Grande de Rusia

José Pascual Domingo de Ribas y Boyons, nacido en 1749 y de origen noble, ingresó en el Ejército napolitano con 16 años.

Cuatro años más tarde, conoció al conde ruso Alexéi Orlov, jefe de la flota rusa en el mar Mediterráneo y hermano de uno de los amantes de la emperatriz Catalina la Grande. Los dos hombres se cayeron bien desde el principio.

Durante la guerra ruso-turca de 1768-1774, el joven políglota aceptó la propuesta de Orlov de ponerse al servicio de Rusia y mudarse a San Petersburgo. Antes de llegar a la capital imperial, De Ribas participó en la batalla de Chesme, en la que los rusos destruyeron la flota otomana haciendo posible para los eslavos hacerse con Azov, la costa situada entre los ríos Dniéper y Bug y posteriormente Crimea.

De Ribas, tras llegar a la ciudad fundada por Pedro el Grande, se alistó en 1772 en el cuerpo de cadetes de Tierra, con la protección de Orlov, a San Petersburgo en 1772 se alistó en el cuerpo de cadetes de Tierra. En San Petersburgo conocería a Anastasia Sokolova, ayudante de cámara de Catalina II, con la que acabó contrayendo matrimonio. De esta unión nacerían dos hijos, de los que fue madrina la mismísima emperatriz rusa

De Ribas fue ascendido a coronel y en 1783 entró al servicio del nuevo favorito de la zarina, el príncipe Grigori Potemkin, con el que viajó al sur de Ucrania. Juntos afianzaron el dominio ruso sobre la península de Crimea, donde crearon el puerto de Sebastopol, la base de la flota rusa del Mar Negro.

El militar español tuvo una brillante actuación en la guerra ruso-turca de 1787-1792. Ganó medallas por la batalla naval del estuario del Dniéper, por su participación en el asedio a la fortaleza de Ochákov, y por la toma de la isla de Berezán, la población de Jadjibei (donde posteriormente se construiría Odesa) y la fortaleza de Ismaíl, un emplazamiento en el Danubio que hasta el momento había sido considerado inexpugnable y era clave para los otomanos.

En 1792, De Ribas fue uno de los tres plenipotenciarios de Potemkim que firmó el Tratado de Jassi, que establecía la paz con el imperio otomano y en el que se cedía a Rusia toda la orilla norte del mar Negro.

En 1794, Catalina II le encargó a fundación de la ciudad de Odesa, destinada a convertirse en la principal puerta marítima del sur de Rusia. Dos años más tarde, fue nombrado gobernador de la ciudad.

Más tarde, en San Petersburgo, donde ya reinaba Pablo I. Allí ascendió al grado de almirante.

Se cuenta que el militar de origen español no pudo mantenerse al margen de las intrigas cortesanas y que participó en una conspiración contra el zar. Sin embargo, el emperador y el almirante tenían muy buena relación, y es posible que eso llegara a poner en guardia al resto de conspiradores.

Poco después, De Ribas enfermó gravemente, falleciendo el 2 de diciembre de 1800 y siendo enterrado en el Cementerio Smolensk de San Petersburgo.

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