10. Puente del Palacio
Uno de los puentes más famosos conecta el centro de la ciudad (cerca del Palacio de Invierno) y la isla Vasilevski (donde se encuentra la Kunstkamera). A menudo se puede ver esta vista en las postales, especialmente por la noche en verano, cuando el puente está abierto y una multitud de personas se reúne allí para observar el paso de los barcos. El moderno Puente del Palacio fue construido en 1916 y se convirtió en el primer puente permanente sobre el río Neva. Consta de cinco vanos y es accesible para coches y peatones.
9. Puente Egipcio
Una belleza en el centro de la ciudad. El Puente Egipcio conecta partes de la avenida Lermontovski a través del pequeño río Fontanka. Lleva el nombre del Antiguo Egipto: así se reflejó en la arquitectura el interés de los científicos del siglo XIX por los misterios de esta civilización. En uno de los malecones del Nevá se pueden encontrar esfinges reales, traídas del Antiguo Egipto, pero las esfinges de hierro, que custodian el puente egipcio, fueron fundidas en una fábrica local en 1826. Las columnas y otros detalles arquitectónicos también fueron decorados al estilo egipcio y ornamentados "como en los viejos tiempos".
8. Puente de Anichkov
El puente Anichkov sobre el río Fontanka se encuentra en la misma Nevski Prospect, rodeado de los antiguos palacios imperiales. Se puede reconocer desde lejos por sus enormes esculturas, que se llaman "Caballos domados". Si se mira de cerca, se pueden ver dibujos con sirenas y caballitos de mar en la barandilla.
Las esculturas que miran en dirección a la plaza Vosstania (a la estación de tren de Moscú) no tienen herraduras, mientras que las que miran hacia el Almirantazgo, sí. Los historiadores explican esta idea arquitectónica de diferentes maneras. Según una versión, los caballos "herrados" son los que ya han sido domados. Y, según otra, en la calle Liteiniy Prospekt (literalmente, la siguiente calle después del puente Anichkov) se encontraban antes muchas herrerías; esto simboliza que los caballos salvajes "van" al herrero, mientras que los que vuelven están herrados y domados.
7. Puente Lomonósov
Aguas abajo del río Fontanka se encuentra otro magnífico puente, bautizado en honor al científico ruso Mijaíl Lomonósov - sin embargo, recibió este nombre en 1948. Antes de eso, el puente llevaba el nombre de Catalina la Grande y luego en honor del Conde Chernishev. En el siglo XIX era un puente levadizo, pero después de su reconstrucción en 1913, el puente dejó de ser levadizo. Está decorado por monumentales torres de granito, conectadas con cadenas. Los mecanismos de tracción estaban escondidos dentro de ellas.
6. Puente de la Bolsa
Es uno de los principales puentes para automóviles de San Petersburgo, que conecta las islas Vasilevski y Petrogradski. Ofrece las vistas más hermosas del terraplén del Palacio, la fortaleza de Pedro y Pablo y el Hermitage. El Puente de la Bolsa está decorado con un tridente de Neptuno. Además, por la noche se ilumina de forma increíble.
5. Puente de la Trinidad
Este es uno de los puentes más insólitos de San Petersburgo. Es un puente levadizo, construido en 1903, que conecta las islas Petrogradski y Admiralteyski. Pero el mecanismo de tracción es de "ala única", es decir, sólo se levanta un vano. Otra característica llamativa del Puente de la Trinidad son sus faroles, que parecen candelabros gigantes, así como los obeliscos de granito con águilas bicéfalas.
4. Puente Bolsheojtinski
Este puente que cruza el río Neva conecta el norte del centro histórico de la ciudad con el distrito de Malaya Okhta. Antes de 1917, se llamaba Puente de Pedro el Grande. Se reconoce fácilmente por las torres de granito en forma de faros de estilo romano, que se iluminan por la noche. El original mecanismo permite levantar el vano central en sólo 30 segundos.
3. Puente tripartito
Tres puentes en un mismo lugar. El "Puente Tripartito" es el apodo dado por los lugareños, y ahora por los guías, a una composición de tres pequeños puentes situados cerca de la intersección del río Moika y el canal Griboyedov, no lejos de la Catedral del Salvador sobre la Sangre Derramada. Oficialmente, estos puentes se llaman Puente del Teatro, Puente Malo-Konyushenny y Puente Lipkin. Todos ellos están realizados en estilo clasicista y decorados con interesantes detalles: una cabeza de Medusa, hojas de palmera y dorados.
2. Puente de los Leones (Puente de los Cuatro Leones)
San Petersburgo es la ciudad de los leones. Decoran palacios, calles y terraplenes. Y, por supuesto, los leones tienen su propio puente: se encuentra cerca del Teatro Mariinsky, en el canal Griboyedov. Está custodiado por cuatro enormes leones de hierro fundido, en cuyo interior se esconden los soportes del puente. Y, por supuesto, los lugareños tienen la leyenda de que hay que pedir un deseo tocando las patas de dos leones vecinos al mismo tiempo. Puede encontrar una copia más pequeña de este puente en el parque Tiergarten de Berlín.
1. Puente de la Ribera
Este puente tan popular entre los habitantes de la ciudad y los turistas se encuentra cerca del canal Griboyedov. Fue inaugurado en 1826 y aún sigue llamando la atención. Sus míticos grifos -o leones alados- disfrazan también los soportes del puente. Según las antiguas leyendas griegas, eran los grifos los que custodiaban el oro en la tierra de los hiperbóreos. También se les llamaba los "perros de Zeus". También custodiaban las reservas de dinero del Imperio Ruso.
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