La Cruz Roja apareció en Rusia el 15 de mayo de 1867, cuando el emperador Alejandro II fundó la Sociedad para el Cuidado de Enfermos y Heridos, que en 1879 pasó a llamarse Sociedad Rusa de la Cruz Roja.
La Cruz Roja Rusa estuvo bajo el patrocinio personal de la emperatriz María Alexándrovna y contó con las contribuciones y el apoyo de los miembros de la Casa Real, que a su vez eran miembros honorarios de la Sociedad.
La primera vez que la Cruz Roja Rusa hizo su aparición en la escena internacional fue durante la guerra franco-prusiana (1879-1871). Al hacerlo, ayudó a ambas partes en conflicto: alemanes y franceses. En el futuro, la Sociedad participará en muchas guerras en los que Rusia no está involucrada, para ayudar a los heridos de los bandos contendientes.
El primer desafío serio para la Cruz Roja Rusa fue la Guerra Ruso-Turca (1877-1878). Esta Sociedad se hizo cargo de prestar casi toda la atención médica que necesitaba el ejército: abrió hospitales, organizó trenes sanitarios y unidades de atención “rápida ", además de salas de emergencia cerca de los campos de batalla.
La Cruz Roja Rusa no se limitó a ayudar a los heridos de guerra, sino que también ayudó a los que sufrieron terremotos, inundaciones e incendios. Durante la epidemia de peste de 1878 en la región de Astracán, la Sociedad repartió zapatos y ropa. Además, construyó dos hospitales permanentes.
En 1882 la Cruz Roja Rusa comenzó a ayudar a los soldados en tiempos de paz. Recibían tratamiento médico gratuito, se les enseñaban distintas artesanías y se enviaba a centros turísticos, para su recuperación, a aquellos que lo necesitaban.
Durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918), decenas de miles de voluntarios prestaron servicio bajo la bandera de la Cruz Roja Rusa: 2.500 médicos, 20.000 hermanas de la caridad y más de 50.000 asistentes. Cuando en 1915 los alemanes utilizaron gas venenoso, la Sociedad produjo rápidamente más de 6 millones de máscaras antigás.
Después de la Revolución de 1917, la Sociedad se convirtió la Cruz Roja Soviética. Desempeñó un papel importante en la enseñanza de primeros auxilios a millones de personas.
Miles de enfermeras salvaron vidas de soldados en los campos de batalla de la Segunda Guerra Mundial. Docenas de ellas fueron galardonadas con el título de Héroe de la Unión Soviética. Durante todo el período de guerra, la Cruz Roja Soviética envió al Ejército más de 1.700.000 litros de sangre de donantes.
En el período de posguerra, la Cruz Roja Soviética emprendió una amplia actividad en el extranjero, especialmente en China, Corea del Norte, Etiopía, Argelia e Irán.
Tras el devastador terremoto de Armenia en 1988, la Cruz Roja Soviética fundó una unidad permanente de rescatistas profesionales.
Hoy en día, la Cruz Roja Rusa ayuda a personas víctimas de diversos desastres naturales y conflictos bélicos, no sólo en Rusia, sino en todo el mundo.
La Cruz Roja Rusa recibe enormes donaciones de ciudadanos y empresas rusas, así como apoyo financiero de las filiales extranjeras de la Cruz Roja.
¿Quiénes son los rescatistas rusos en la actualidad? Descúbrelo pinchando aquí.
¿Quieres recibir la información más destacada sobre Rusia en tu correo electrónico? Pincha aquí y recibe cada viernes el material más interesante.
La ley de derechos de autor de la Federación de Rusia prohíbe estrictamente copiar completa o parcialmente los materiales de Russia Beyond sin haber obtenido previamente permiso por escrito y sin incluir el link al texto original.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia:
