El pasado 23 de septiembre, por decreto del presidente ruso Vladímir Putin, se prorrogó por 3 meses el permiso de permanencia en Rusia para los extranjeros cuyo permiso de residencia hubiera expirado, pero que se hubieran encontrado atrapados en el país a causa de la pandemia, según se desprende del texto de la ley publicado en la web del gobierno.
En la práctica, esta medida supone la prórroga de los permisos de residencia y la suspensión de la expulsión de los extranjeros del territorio ruso. Además, si existe la posibilidad de regresar a su país, se permite a los extranjeros cruzar la frontera sin penalización por la expiración de sus documentos.
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