En primer lugar, el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, canceló el sistema de pases digitales que debían ser emitidos con fines personales (no más de 2 veces a la semana) para ir al trabajo o al hospital, para comprar alimentos u otros productos necesarios.
Gente en la calle Nikólskaia.
Serguéi Savostiánov/TASSEl alcalde también canceló los horarios de paseos, según los cuales los residentes de Moscú sólo podían salir a caminar en una franja horaria determinada (esta medida empezó a funcionar una semana antes de que se levantara la cuarentena) y las restricciones para el funcionamientos del carsharing.
La gente difruta de un día soleado mientras hay un cambio de guardia en los jardines Aleksándrovski.
ReutersLos moscovitas aprovecharon inmediatamente la oportunidad de poder pasear por el centro de la capital.
Los moscovitas tomando el sol en los parques de la capital.
AP
Las mujeres sacándose las fotos.
El mismo día se formaron atascos en el centro, aunque ocasionalmente ya se vivieron atascos durante la cuarentena, especialmente en los últimos días de esta.
Una de las calles céntricas de Moscú.
APMientras la gente en el metro mantiene una distancia de 1,5 m, la mayoría de los moscovitas se mueven por la ciudad con máscaras y guantes puestos.
El ambiente en el metro el 9 de junio.
Victoria RiábikovaA partir del 9 de junio, peluquerías, salones de belleza, estudios fotográficos, clínicas veterinarias y agencias de empleo abrieron sus puertas.
En uno de los salones de belleza de Moscú.
Ekaterina Chesnokova/SputnikLas terrazas de las cafeterías, museos, salas de exposición y zoológicos abrirán a partir del 16 de junio. En el momento en el que se publicó este artículo, a los restaurantes y cafés que hasta ahora realizaban entregas en domicillo, por su cuenta o a través de servicios de entrega como el Delivery Club y Yandex, se les permitió entregar comida para llevar a través de puertas traseras o ventanas laterales.
Uno de los McDonald's de Moscú el 9 de junio.
Victoria RiábikovaSe espera que a partir del 23 de junio se abran parques infantiles y parques (algunos abrieron el 1 de junio), gimnasios y piscinas.
“Los niños podrán volver a disfrutar de los columpios, los amantes del deporte a fortalecer sus músculos en las máquinas que se encuentran en las calles, y las abuelas podrán sentarse en los bancos de los patios, plazas y parques de Moscú”, escribió el alcalde Sobianin en su blog.
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