La persona que mejor suelda de Rusia es una mujer. No es el Día de los Inocentes. La moscovita Diana Bagautdínova fue la única representante femenina en un concurso de soldadura celebrado en Rusia a finales de agosto. Y no estaba de relleno sino que derrotó a un par de docenas de hombres en la ronda final, gracias a lo cual salió victoriosa. ¿Por qué esta estudiante de 19 años está tan enganchada a la soldadura?
“El proceso de soldadura me fascina muchísimo”, dice Diana. “Es muy estimulante mirar una chispa ardiente, mientras unes el metal. Es realmente hermoso”.
La joven se enamoró de la soldadura hace tres años, durante su formación práctica en la universidad, donde estudiaba ingeniería de sistemas de calefacción. Su supervisora quedó impresionada por el trabajo de Diana y le habló del campeonato WorldSkills, un concurso para jóvenes especialistas de diferentes profesiones, desde chefs hasta constructores.
La madre de Diana se sorprendió mucho cuando supo que su hija iba a participar en el evento. “Mis amigos también estaban asombrados por mi afición, pero todos me apoyaron y me motivaban cuando las cosas salían mal y quería dejarlo todo”, explica Diana. Con el objetivo de prepararse para el concurso, perfeccionó sus habilidades de soldadura día y noche.
En el concurso había cuatro módulos diferentes, cada uno de los cuales dedicado a un tipo particular de soldadura, tanto con tuberías simples como con instalaciones complejas, así como con metales diversos. Los jueces evaluaron la velocidad del trabajo, la calidad, el aspecto y la firmeza de las creaciones. Diana obtuvo el mejor resultado.
La soldadura se considera un trabajo físicamente duro y peligroso y por eso esta profesión está dominada por los hombres. Cuando algunos competidores masculinos vieron a Diana, se sorprendieron. Pero a ella esto no le afectaba en absoluto.
“Estaba bien mentalmente porque los chicos me trataban como a una igual”, explica Diana. Aunque añade que le gustaría que la vieran no tanto como una “soldadora”, sino como una “sólida profesional que hace un buen trabajo”.
Hasta ahora, Diana ha sido capaz de dominar varios tipos de soldadura. Cuenta con un nivel cinco de profesionalidad, sobre seis. Admite que, además de ella misma, solo conoce a un par de mujeres que se dedican a la soldadura. Esta cifra está a punto de aumentar, ya que Diana imparte clases magistrales de soldadura para estudiantes de secundaria, tanto chicos como chicas.
Combina la docencia con sus estudios en la Universidad Rusa de Transporte de Moscú y tiene planes de continuar su carrera profesional.
Tras su victoria, Diana tiene la opción de unirse al equipo nacional de WorldSkills y representar a Rusia en los campeonatos mundiales.
En estos momentos las prioridades de Diana son el trabajo y el estudio. Solo tiene tiempo libre durante los fines de semana y lo suele pasar leyendo en casa (le gusta Harry Potter) o paseando por el parque.
También queda con amigos de la universidad, entre los que hay algunos soldadores. Admite que no le suele gustar salir por la noche. Tampoco le dedica mucho tiempo a las redes sociales, pero se está pensando en abrir una cuenta en Instagram, que obviamente dedicará a su amada afición.
No tiene novio pero cree que su profesión no interferirá con su vida personal. “Si una persona te ama realmente, acepta todo lo que tiene que ver contigo, lo que incluye tus intereses”, comenta.
Así es Alexandra Ívleva, diseñadora y soldadora, que rompe estereotipos.
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