Es esa época del año otra vez. No, no nos referimos al período de vacaciones, ni al disfrutar de tres breves meses de buen tiempo. Es tiempo de sandía. Imagínate esto: un día de verano caliente en Moscú. Estás en el coche, avanzando lentamente hacia la siguiente intersección, después de lo cual el tráfico se aliviará y quizá tengas la oportunidad de llegar temprano a tu dacha. Es sábado, y casi sería una ofensa criminal no traer contigo en el auto un par de frescas y jugosas sandías.
¡El trabajo infantil está bien cuando se trata de sandías! Este muchacho de aldea está más que feliz de ayudar con la cosecha, porque sabe que pronto estará metiendo sus manos en una sandía grande y jugosa.
La principal región en Rusia en producción de sandías es Astracán, a unos 800 km al sur de Moscú. La fruta ama el clima cálido y no hay mejor lugar para cultivar melones, aunque hay otras regiones que producen también.
Así es: ningún ruso se siente realizado sin una rebanada de sandía en la mano, al menos en verano. Cuando los rusos no estamos ocupados bebiendo vodka o hackeando instituciones gubernamentales, por lo general disfrutamos de pasar el tiempo con amigos y familiares en nuestras dachas, cocinar shashlik y comer sandías. No hay comida de verano sin al menos una rebanada de esta maravillosa fruta.
Aunque el tiempo para las mejores sandías es el comienzo de agosto, la mayoría de las tiendas comienzan a venderlas en julio o incluso junio. Demonios, yo vi a una mujer llevando uno a finales de abril. Probablemente no fuera tan buena, pero la entiendo. ¡Esperar a la llegada de agosto es tan duro!
Todo lo que quede atrás después de una abundante cosecha se distribuirá entre los aldeanos. El hombre de arriba decidió no retrasar la fiesta y se regodea en la fruta madura sin vacilar.
Durante el verano, los melones –y especialmente las sandías– se venden en todas partes. Desde los supermercados más grandes de las ciudades más pobladas hasta las tiendas de comestibles más pequeñas en medio de la nada, está garantizado que encontrarás un puesto de venta de sandías durante el verano.Durante el verano, los melones –y especialmente las sandías– se venden en todas partes. Desde los supermercados más grandes de las ciudades más pobladas hasta las tiendas de comestibles más pequeñas en medio de la nada, está garantizado que encontrarás un puesto de venta de sandías durante el verano.
La dulce y jugosa carne de una sandía es más que refrescante: apaga la sed y calma tu alma.
Aquí te damos 10 razones por las que merece la pena ir a la dacha en verano.