El pasado 23 de junio, la ciudad rusa de Barnaul, en el Krái de Altái (Siberia), sufrió una fuerte tormenta que provocó cuantiosos daños en edificios y dejó a miles de personas sin electricidad.
Los testigos se refirieron al huracán como algo “apocalíptico”. Arrancó cientos de árboles y vallas publicitarias, destrozó muchos tejados, derribó el tendido eléctrico y volcó numerosos vehículos.
Según los informes, la tormenta dañó siete edificios de la ciudad y volcó una grúa, matando al operario. También afectó a un crucero con 150 personas a bordo que estaba en el río Ob. Hubo 15 heridos pero el barco pudo alcanzar la orilla y se rescató a los pasajeros.
Alucina con este otro suceso ocurrido recientemente en Rusia. Héroe trajeado rescata a mujeres de inundación repentina en ciudad anfitriona del Mundial.