1. Fumar en cafés y restaurantes
Obviamente no todos van a echarlo de menos. En 2007 estaba permitido fumar en casi cualquier lugar de Moscú. Los cafés y restaurantes tenían lugares separados para fumadores y no fumadores y en los aeropuertos había puntos para fumar cerca de las puertas. En 2013 entró en vigor una nueva ley que prohibía fumar en lugares públicos, una de las más severas de Europa, y es que prohíbe fumar hasta en la entrada de los edificios. El coste de los paquetes de cigarrillos también ha aumentado aunque siguen siendo baratos en comparación con Occidente. Cuando tuvo lugar prohibición hubo muchas quejas pero ya lo hace poca gente. Desde 2013 el número de fumadores se ha reducido en un tercio.
2. Aparcamiento gratuito en el centro
En 2007 los aparcamientos no estaban organizados en torno a un monopolio, como están ahora. Los conductores podían dejar su vehículo en todo el centro y era un poco desastroso. El aparcamiento de pago se concentraba cerca de las estaciones de tren y en los aeropuertos, pero desde 2013 para aparcar dentro del Anillo de los Bulevares hay que pagar. Este año se ha extendido a algunas partes de las afueras de la ciudad. No hay que decir que ha levantado la ira de los residentes locales.
“En el centro todo es más conveniente”, comenta la moscovita María Kozhévnikova. “Pero la expansión más allá del tercer anillo, es una locura”.
Por otro lado, la capital rusa cuenta con más recursos de transporte público, taxis y carriles bici, por no hablar del sistema de alquiler de bicicletas y unas aceras más anchas.
3. Comprar alcohol por la noche
Muchos moscovitas recuerdan con cariño cuando podían ir a una tienda y comprar una o dos botellas a las 3 de la mañana. Desde 2012 hay un horario estricto para vender alcohol: entre las 8 de la mañana y las 11 de la noche. Algunos días las restricciones son incluso mayores, como cuando hay bailes en las escuelas.
4. Los kioskos cerca del metro y en los pasadizos
Antes se podía comprar cualquier cosas en las tiendas que había cerca del metro, desde cigarrillos hasta ropa. También había locales para reparar zapatos, de copia de llaves y otras cosas. Pero todo cambio en el verano de 2016 cuando se demolieron más de 100 kioskos ilegales por la noche.
5. El hotel más grande del mundo
Oficialmente en Hotel Rossia, situado cerca del Kremlin, era el más grande del mundo, tal y como se dice en el Libro Guinness de los Récords. Con más de 3.000 habitaciones fue el más grande de Europa hasta su demolición en 2006. Construido en 1977 se convirtió en un lugar icónico. En su interior se celebraron conciertos y fiestas. En 2017 en su lugar se abrió el parque Zariadie que, hasta el momento ha sido todo un éxito.
6. Tomar un taxi levantando la mano en cualquier lado
Hace diez años todo lo que había que hacer para subirse a un automóvil era levantar la mano junto a la carretera. La mayoría de las veces paraba un taxi sin licencia, sin taxímetro y sin la seguridad que ofrecen las aplicaciones de taxi actuales.
7. Viajar en tren sin billete
Hace una década no había tantos tornos en las estaciones de tren como hay actualmente. Los moscovitas rara vez pagaban los trenes de cercanías y si lo hacían, se limitaban a pagar un billete a la estación más cercana. Ahora la gente está obligada a pagar el precio completo.
8. Jamón ibérico y parmesano
En agosto de 2014 Rusia reaccionó a las sanciones europeas bloqueando las importaciones de productos alimentarios procedentes de la UE. El bloqueo afecta a la carne, al pescado, a las verduras, a las frutas y a los frutos secos así como a la leche y a los productos lácteos. Hasta ahora era posible encontrar casi cualquier tipo de queso o jamón en las tiendas.
Tres años después los supermercados rusos están llenos de carne y productos lácteos locales aunque muchos moscovitas echan todavía de menos el jamón español y los quesos europeos.
9. Jugar en el casino
Los primeros casinos abrieron en Moscú tras la caída de la URSS. La zona de juego más famosa era 'Metélitsa' en Novi Arbat. Los nuevos rusos no dejaban de mostrar allí su dinero y los empresarios hacían allí sus negocios.
En 2009 se prohibieron los casinos en Moscú. Desaparecieron los carteles de las calles. Las timbas ilegales son cada vez menos habituales. En 2009 el Gobierno creó cuatro zonas especiales de juego en el país pero no han atraído muchos turistas, todavía.
10. Leer el periódico en papel
Los periódicos en papel está desapareciendo poco a poco en todos los sitios. Hace diez años los moscovitas estaban acostumbrados a comprar revistas y periódicos en kioskos de camino al trabajo y pasaban un largo tiempo de su fin de semana en busca de nuevos libros en librerías como Biblio Globus. Con el desarrollo de Internet, muchos medios que antes eran icónicos, han desaparecido. Algunos moscovitas echan de menos las publicaciones en papel pero también hay buenas noticias, en 2007 surgió Russia Beyond. Aquí puedes informarte de todo lo relaciones con Rusia.