A finales de 2018, Rusia parecía ser el tercer país del mundo con mayor crecimiento en su producción de gas natural licuado (GNL), por detrás de Australia y Estados Unidos, según la agencia de análisis Refinitiv.
“Australia ha experimentado el mayor crecimiento de producción. Estados Unidos ocupó el segundo lugar, mientras que Rusia la tercera nación, con una pequeña brecha”, dice uno de sus estudios recientes.
Cabe señalar también que estos países son los que más contribuyen al aumento de los volúmenes de producción, tendencia que debería continuar en 2019. De hecho, mientras que el año pasado se produjeron unos 432.000 millones de metros cúbicos (bcm), 36 bcm más que en 2017, en este nuevo año el aumento debería incrementarse a 46 bcm, casi exclusivamente gracias al desarrollo de esta industria en las tres naciones mencionadas anteriormente.
“Se espera que nuevos proyectos en Estados Unidos añadan casi 20 bcm a la oferta este año, seguidos por la que se desarrollan en la península rusa de Yamal con 12 bcm. Con una segunda tanda de proyectos de GNL, se espera que Australia aumente sus exportaciones en 9 bcm”, declaró.
Cabe recordar que Rusia está desarrollando activamente sus plantas de producción de GNL en el Lejano Norte, con la planta de GNL de Yamal, que inició su producción en diciembre de 2017, y la planta de GNL-2 del Ártico, que entrará en funcionamiento en 2023.
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