Oasis medieval a media hora del centro de Moscú

En el siglo XIII el príncipe Daniil de Moscú construyó una iglesia donde en 1272 se creó un monasterio. Posteriormente, en el XVII este monumento histórico evolucionó para convertirse en la residencia de los obispos Sarskij y Podonskij y vivió su máximo esplendor en los años 1664-1676: Krutítskoie Podvorie estaba ubicado en medio de dos vías importantes de Moscú que llevaban a Kolomna y a Riazán.

En el pasado esta era una calle muy frecuentada y llena de vida: había iglesias, pasaban carruajes y desde las ventanas de la torre de Krutítskoie los metropolitanos bendecían al pueblo que se reunía en la plaza, repartían limosna entre los mendigos y disfrutaban de unas hermosas vistas de la ciudad.

Este lugar sufrió varias turbulencias históricas, como el conocido Período Tumultuoso en 1612 o el incendio de Moscú durante la guerra contra Napoleón en 1812. A pesar de las conmociones de la Edad Media y de haber permanecido completamente vacío durante la época soviética, Krutítskoie Podvorie ha conservado el 80 % de sus detalles arquitectónicos y ahora forma parte del Patriarcado de Moscú.

Por suerte, Krutítskoie Podvorie no ha perdido su carácter: calles pavimentadas con piedras redondas, casas antiguas de madera con contraventanas, edificios de ladrillo y pequeñas iglesias del siglo XVII e incluso una fortificación.

Lo mejor de Krutítskoie Podvorie es que se encuentra fuera de las principales rutas turísticas pero a la vez sigue estando cerca del centro de la ciudad. No hay ningún autobús ni necesidad de hacer cola, simplemente algún viajero solitario, algún fotógrafo o equipo de rodaje de películas históricas, eso es todo lo que uno puede encontrar.

Dos de las iglesias del lugar siguen activas, la iglesia de la Resurrección y la de la Asunción de la Virgen María. En ambas se ofrecen misas todavía y se permite la entrada.