¿Sabías que los dragones son unos de los protagonistas más habituales en las esculturas de Rusia? Estos terribles seres se pueden encontrar en muchas ciudades del país eslavo e incluso son el símbolo de gran cantidad de lugares. ¿Te sorprende?
1. Kazán (800 km al este de Moscú)
Zílant es el símbolo de Kazán. Se trata de una serpiente alada y un personaje épico de los tártaros. Según la leyenda, vivía en una montaña local. Dicen que actualmente vive en el lago Kabán y guarda el tesoro de la regenta Syuyumbiké. La imagen del dragón estaba tanto en el sello del kanato de Kazán, así como en el escudo de armas de la región. Ahora, en la bandera y en el escudo de armas de la ciudad aparece una corona de oro con la imagen de un dragón, que a menudo decora edificios y vallas.
Además hay otros dos famosos dragones de Kazán, que protegen el edificio que alberga el centro de la familia de esta ciudad. La construcción tiene forma de la típica caldera utilizada para hacer platos tártaros nacionales y fue construida para la Universiada.
2. Óblast de Lípetsk (400 km al sur de Moscú)
Si le preguntas a un ruso a dónde va, tal vez te diga: “A Kudíkina Gorá” (“A la montaña Kudíkina”; kudika es la persona que pregunta al cazador a dónde va). Sin embargo, nadie ha visto nunca esa montaña legendaria. En realidad, la frase se utiliza cuando alguien no quiere revelar sus planes y le molesta la pregunta. Aunque la verdad es que hemos conseguido encontrar este lugar. Está situado en el parque de atracciones Kudíkina Gorá. Aquí el rey es un enorme dragón de tres cabezas llamado Zméi Gorínich (literalmente “dragón de la montaña”). Según el folclore eslavo, el mítico animal protege el puente de Kalínov, la frontera entre la vida y la muerte. Es aterrador y puede arrojar chispas, humo y fuego. Como era esperable es la atracción más popular del parque. Los fines de semana a las 18:30 horas se puede ver al mítico dragón ruso echando fuego por la nariz.
3. Sochi (1.600 km al sur de Moscú)
En Sochi, un dragón es el encargado de proteger el Vellocino de Oro. Esta composición simbólica basada en el antiguo mito griego de los argonautas apareció en esta ciudad turística hace, aproximadamente, una década. Los creadores tenían la intención de relacionar los Juegos Olímpicos de Invierno de 2014, que se organizaron aquí, y los primeros Juegos Olímpicos. Además, hay quienes piensan que tocar el Vellocino de Oro ayuda a mejorar la situación económica de uno mismo.
4. Peterhof (45 km al oeste de San Petersburgo)
Peterhof, el “Versalles ruso”, es una de las atracciones turísticas más famosas y pintorescas del país. Atrae a millones de visitantes a San Petersburgo cada año. El parque es famoso por sus fabulosas fuentes. Una de las más antiguas es la Gran Cascada de Ajedrez. La parte superior de la estructura está custodiada por tres dragones. El agua sale de la boca de las bestias y cae en el estanque de abajo, antes de fluir hacia la gruta inferior.
5. Pushkin (25 km al sur de San Petersburgo)
La antigua residencia de verano de los zares, ahora llamada Pushkin (su nombre anterior es Tsárskoe Seló) ha sido fuente de inspiración de muchos poetas y artistas rusos. Hay varios puentes en el estilo chino, y es que durante el siglo XVIII, época del Imperio ruso, era algo muy popular. El puente del Dragón está decorado con cuatro serpientes con alas de hierro sobre pedestales de granito.
6. Vladivostok (9.000 km al este de Moscú)
El símbolo del campus de la Universidad Federal del Lejano Oriente, situado en la isla Russki, es el llamado “Dragón Amistoso”, muy querido entre los estudiantes, el personal y los visitantes. La escultura es obra del artista holandés Joshua Pennings y se colocó en la universidad en 2013. Según la leyenda, el inteligente y valiente dragón poseía una joya mágica que daba sabiduría y conocimiento, pero la dejó caer. Siglos después se descubrió en el lugar donde hoy se encuentra la universidad. Desde entonces, el dragón ha sido considerado como el guardián del conocimiento y un infatigable luchador contra la pereza.
7. Krasnoyarsk (4.000 km al este de Moscú)
Se trata casi de una copia exacta de uno de los hijos de los Daenerys de Juego de tronos. Apareció en las afueras de Krasnoyarsk este mismo verano. El gigante de hierro sonríe y mueve sus alas. Sin embargo, hay algunos problemas con la cola (y es que aún no se ha añadido), pero a los locales les gusta así. Se desconoce la historia sobre su aspecto.
8. Elistá (1.300 km al sur de Moscú)
La capital de la República de Kalmukia también tiene su propio dragón. La fuente del Niño y el Dragón apareció en el centro de la ciudad en 1995, y se basa en una epopeya calmuca. Según la leyenda, un niño local repelió a la bestia, lo que implicó que hubiera fuertes lluvias y truenos cuando se posó sobre la tierra. Al ahuyentar al dragón, el valiente muchacho consiguió salvar a su pueblo de la destrucción.
9. Krai de Zabaikalie (6.500 km al este de Moscú)
El datsán Aguinski es uno de los mayores complejos de monasterios budistas en el krai de Zabaikalie. El primer templo se fundó a principios del siglo XIX. El datsán se construyó según los cánones y está decorado con numerosas esculturas de dragones, símbolo de sabiduría y poder celestial.
10. Moscú
Desde la época medieval, el símbolo de Moscú ha sido San Jorge clavando una lanza a un dragón. Es el defensor del pueblo y protector contra los invasores extranjeros. El símbolo aparece en el escudo de armas de Moscú y Rusia. Y, obviamente, es uno de los monumentos centrales de la capital.
Algunas de las esculturas más bonitas de Rusia se encuentran en San Petersburgo. Descúbrelo aquí.