Pasiones revolucionarias: Che Guevara
Para los rusos la figura de Che Guevara siempre tuvo, y sigue teniendo, un significado especial. A los rusos les atrae su espíritu revolucionario, la lucha incansable, su voluntad así como su fuerte carácter. No es de sorprender que se hayan creado diferentes versiones en ruso de la famosa balada Comandante Che Guevara.
Pero aparte de traducir e interpretar la famosa canción cubana, los rusos crearon sus propias obras para rendir homenaje a su ídolo revolucionario.
En julio de 1978 el famoso cantante ruso Iósif Kobzón presentó en el Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes en La Habana la canción En recuerdo a Che Guevara que se llevó el primer premio de la competición. La emotiva canción fue compuesta por músicos soviéticos con motivo del desmantelamiento de un monumento a Che Guevara en Santiago de Chile.
La canción reza:
A Che Guevara torturan de nuevo,
¿Para qué hostigar el metal?
La parte central de la canción está narrada en primer persona:
Soy Ernesto, soy el hijo de la aureola,
Resurgí de la no-existencia,
Y del estado rojo
¡No saldré nuunca!
La Balada de Che Guevara compuesta por el popular grupo soviético “Pesniarí” en 1977, tuvo un enorme éxito en la URSS.
La canción convierte en “el Dios pecador” la figura del revolucionario, que “vivió como la pólvora comprimida” y a quien los enemigos no olvidarán en mucho tiempo.
No hacen falta orquestas.
Que los dedos despierten la guitarra,
Cantemos sobre Ernesto,
Cantemos sobre ti, Che Guevara.
En las Navidades de 1962, en el programa dedicado a la celebración de la Noche Vieja, el cantante soviético Iósif Kobzón, vestido al estilo militar de Fidel Castro y con una barba postiza, presentó la canción Cuba, mi amor que se convirtió en un verdadero hit soviético.
El título de la canción Cuba, mi amor, se convirtió en una frase hecha.
Pasiones futbolísticas: ‘Argentina-Jamaica 5:0’
La canción del grupo ruso Chaif es de 1998 y está dedicada a la derrota de la selección jamaicana en el Mundial de Fútbol en París celebrado aquel mismo año. El solista del grupo musical, Vladímir Shajrín, estaba en la capital francesa en ese momento. Paseando al lado de la Torre Eiffel vio a los hinchas jamaicanos cantando canciones tristes, mientras que a su lado había un grupo de argentinos gritando y bailando de alegría. Era el 21 de junio de 1998. Al volver a Rusia, el músico del grupo Chaif compuso la canción Argentina-Jamaica 5:0 que se convirtió en un éxitoy mantuvo su popularidad durante varios años.
La canción compuesta al estilo reggae compadece de la derrota jamaicana y tiene una melodía fácil de recordar:
¡Qué dolor! ¡Qué dolor!
Argentina-Jamaica 5:0.
¡Qué dolor! ¡Qué dolor!
Argentina-Jamaica 5:0.
Pasiones méxicanas: ‘Acapulco, ay, ay, ay’
Muchos rusos, al escuchar esta extravagante y sensual canción que se grabó en los años 90, se preguntaban: ¿qué es esto? ¿dónde está ese Acapulco? Para aquellos que no lo entendieron a la primera, la puesta en escena de la cantante del origen letón, Laima Váikule, lo explica todo de forma inequívoca.
El seductor calor de México, un macho latino, un cactus, una mujer vestida al estilo de Frida Kahlo… mucha pasión, un corazón roto y un asesinato.
Me besabas en los labios por todos aquellos que me habían amado,
Pero esta vez bailé rumba con otro.
Cuando me viste, se te cambió la cara,
Luis, él de quien tienes celos, es tu amigo José.
Acapulco, ay, ay, ay
Acapulco, ay, ay, ay
Acapulco, ay, ay, ay, ay, ay, ay-ay, ay, ay, ay
Esta poco sofisticada pero entretenida canción hizo furor entre los rusos, que seguían la música popular. Seguramente, después de aparición de esta obra, el flujo turístico de Rusia a México empezó a crecer a ritmo de vértigo. Los rusos siempre echan en falta el sol, la pasión y el amor, así que los creadores de la canción dieron en el clavo con este tema.
Síguenos en nuestro canal de Telegram: https://t.me/russiabeyondes
LEE MÁS: 100 grandes canciones soviéticas que todo ruso conoce (Vídeos)