Hacer bien la masa es la parte más importante del trabajo. No debe romperse, pero tampoco debe ser demasiado espesa. Para un resultado ideal, tamiza la harina antes de amasar la masa para que se sature de oxígeno y sólo contenga partículas finas. Y añade un poco de aceite vegetal.
Amasa la masa durante al menos 10 minutos, estírala bien y vuélve a ponerla en el bol. Cuando esté hecha, haz una bola, cúbrela con papel film o una toalla húmeda y déjala a temperatura ambiente durante 30 minutos.
Para unos pelmeni jugosos, la mejor opción para el relleno es la pechuga de cerdo. Si quieres que tenga menos grasa, elige jamón o cuello. Puedes cocer previamente el caldo de carne y verter un poco directamente sobre la carne picada. Para darle más jugosidad, se puede añadir cebolla cruda o hielo picado.
Normalmente, los pelmeni siberianos son pequeños, del tamaño de una nuez. La proporción masa/relleno es de 1:1, pero si es la primera vez que los preparas, es mejor no pasarse con el relleno.
A los pelmeni les encanta estar congelados. Así que mete los pelmeni recién hechos en el congelador durante al menos 10 minutos y luego cocínalos. No es necesario descongelar los pelmeni de antemano, y nunca vuelvas a congelarlos. La masa podría agrietarse y filtrar el relleno durante la cocción.
Los pelmeni agradecen que se les cueza en una olla grande para que no se peguen los unos a los otros. Salar el agua, llevar a ebullición, poner los pelmeni en la olla y remover para que no se peguen.
Los mejores acompañantes de los pelmeni son la smetana (nata agria), la mantequilla y las hierbas frescas.
(para 80-100 pelmeni)
1. Echar un montón de harina en la superficie de trabajo. Hacer un hueco en la parte superior y añadir el huevo, el aceite de girasol, la sal y el azúcar. Amasarlo añadiendo un poco de agua hasta que deje de pegarse a las manos y a la mesa. Esto te llevará al menos 10 minutos.
2. Convierte la masa en una bola y déjala reposar durante 30 minutos en un lugar cálido bajo un envoltorio de plástico.
3. Corta la ternera, el cerdo y las cebollas en trozos medianos. Pásalo todo por una picadora de carne con un dado grande. Añade sal y pimienta negra molida a la carne picada, y mézclalo todo hasta que quede suave. Si se nota seco, añade un poco de agua hervida fría.
4. Enrolla la bola de masa en forma de salchicha y córtala por la mitad. Envolver en plástico uno de los trozos (que se utilizará para la segunda tanda de pelmeni). Toma la otra, estírala con la mano y, a continuación, extiéndela sobre una superficie espolvoreada de harina con un rodillo hasta que se convierta en una capa fina.
5. Con ayuda de un vaso, cortar la masa en pequeños círculos idénticos.
6. Amasar cada círculo con los dedos, colocar el relleno en el centro, pellizcar los bordes y unir.
Repite lo mismo con cada círculo.
7. Coloca los pelmeni sobre una tabla de cortar o bandeja espolvoreada con harina (también puedes espolvorear harina por encima) y mételos en el congelador durante 40-60 minutos. Después, cocerlos o meter en una bolsa para seguir congelando; ya no se pegarán.
8. Hervir agua en una cacerola grande y salar ligeramente. Añadir la hoja de laurel y la pimienta negra. Cuando el agua empiece a hervir, echar los pelmeni y remover para que no se peguen al fondo. Cuando los pelmeni suban a la superficie, cocer otros 5-7 minutos.
9. Los pelmeni se pueden comer con o sin caldo. Lo mejor es servirlos con mantequilla, smetana y/o hierbas frescas.
¡Priyátnogo appetita!
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