El sabor de esta ensalada económica se asociaba a menudo con la realización de un viaje en trenes de larga distancia en la época soviética. Ahora también podemos disfrutar de esta joya culinaria de una época pasada, sin necesidad de viajar en tren.
En la época soviética, los beneficios para la salud de los subproductos del hígado eran muy apreciados, por lo que los platos de hígado solían ocupar un lugar destacado en los menús.
El hígado es un tesoro de nutrientes. Entre los platos posibles de comer en Rusia se encuentran el hígado con salsa de nata, los corazones de pollo con cebolla, la sopa de menudillos, las tortitas de hígado, la salchicha de hígado y los patés. El hígado siempre se preparaba de forma que el plato fuera rico y suculento.
Un plato especial era la peculiarmente llamada “Ensalada del Pasajero” (Pasazhirski salat). Según muchos veteranos, esta ensalada se servía en el vagón restaurante de los trenes de larga distancia y en las estaciones. De ahí el nombre de 'passazhir' – “pasajero”. Debido a su escasez cuando se viaja, la comida suele saber mejor en el camino. Así que incluso los pasajeros más quisquillosos devoraban con gusto esta ensalada. De hecho, la combinación de ingredientes se pensó con mucho cuidado.
En primer lugar, se cocinaban los ingredientes, porque se suponía que la ensalada tendría que conservarse algún tiempo sin refrigeración durante el viaje. El hígado se cortaba en juliana y tenía una textura suave. Las cebollas fritas añadían ternura y jugosidad, y las zanahorias daban un dulzor extra y un aspecto festivo.
Los pepinos salados o encurtidos le daban una textura crujiente y frescura. El tradicional aderezo de mayonesa soviético, combinado con los ingredientes igualmente cortados, le daba un toque extra de picante y acidez. La ensalada era abundante, sana y deliciosa.
No puedo decir que esta ensalada fuera muy popular y se preparara a menudo, pero algunas familias también la preparaban en casa, tras inspirarse en este aperitivo durante un viaje de larga distancia.
Después de haberla preparado en casa, puedo decir con seguridad que es una forma maravillosa y sencilla de preparar el hígado. La Ensalada del Pasajero sólo tiene cuatro ingredientes principales, es económica y el sabor es original. También he añadido un poco de mostaza y hierbas frescas.
Esta ensalada quedará muy bien en una mesa de celebración, o puede ser un tentempié abundante cuando estas de viaje o en un picnic.
Preparación:
Cortar el hígado de ternera en trozos grandes y freírlo en una mezcla de mantequilla y aceite de girasol. Freír el hígado de ternera durante 20 minutos, dependiendo del tamaño de los trozos. Deben estar blandos pero no sangrantes. Sazonar con sal y pimienta al gusto.
Colocar en un plato para que se enfríe.
En la misma sartén, freír la cebolla y las zanahorias cortadas en juliana, hasta que estén blandas. Condimentar con sal, pimienta y laurel al gusto. Corta las zanahorias a mano para que los trozos queden enteros, conserven su forma y sean del mismo tamaño que los demás ingredientes.
Cortar el hígado en juliana.
Mezclar el hígado, la mezcla de cebolla y zanahoria y los pepinos en un bol.
Aderezar con mayonesa.
Servir con hierbas frescas.
¡A Disfrutar!
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