El jinkali es uno de los platos más característicos de Daguestán, y tiene muchas variantes. El clásico de Daguestán consiste en trozos gruesos y blandos de masa de kéfir servidos con carne de vaca, caldo y salsas. Por lo tanto, no debe confundirse con el plato georgiano igualmente conocido que lleva el mismo nombre: el jinkali, que es una gran bola de masa de carne en forma de saco.
El jinkali daguestaní tiene una variante primaveral: la variante avar con cebollas silvestres. Los avaros son el pueblo más numeroso que vive en Daguestán. Se trata de un plato de temporada que rara vez se encuentra en los menús de los restaurantes. Hay varias variantes, que difieren en la técnica y en los ingredientes, y yo he elegido la que le irá bien a todo el mundo y conservará el sabor auténtico.
He utilizado una receta con kéfir y huevo, aunque mucha gente hace el jinkali de primavera de Avar sólo con agua. Triturar el kéfir con bicarbonato y amasar la masa durante mucho tiempo da al plato final un aspecto hinchado. Aquí empiezan los matices: la masa puede pegarse a las manos, y si se añade más harina será menos tierno. Algunas amas de casa hacen los jinkali inmediatamente después de combinar los ingredientes, utilizando harina para evitar que la masa se pegue. Es importante poner mantequilla en un bol de jinkali cocido y caliente para que no se pegue.
He utilizado cebollas verdes normales como relleno de primavera. Las amas de casa de Avar sirven queso local con este plato. Algunas asan un pavo y una salchicha casera y lo sirven en un plato con leche. Otras sirven el caldo de pollo y los trozos de pollo por separado. Yo he utilizado una ración sencilla con yogur griego y cebollas verdes frescas.
Ingredientes para 2-4 raciones
- 280 g de harina
- 100 ml de kéfir
- 1 huevo
- Media cucharadita de sal
- Media cucharadita de soda
- 150 g de cebolla verde
- 30 g de mantequilla
Preparación:
Añadir el bicarbonato y la sal al kéfir y dejar reposar la mezcla durante 20 minutos. Añadir el huevo al kéfir.
Picar las cebollas verdes finamente y colocarlas en un recipiente hondo.
Combinar la cebolla con la mezcla líquida.
Añadir la harina poco a poco. La masa será pegajosa. Algunas amas de casa de Daguestán la amasan hasta que sea elástica y no se despegue de las manos. Algunas forman los jinkali después de combinar la masa.
Reunir la masa, espolvorearla con harina y dejarla reposar durante 30 minutos.
Puedes dividir la masa en partes, hacer tiras y cortar en cubos.
Hacer un pan plano de 1,5 cm, espolvoreando la superficie con harina. Córtalo en rombos.
Hervir el jinkali en agua con sal y ponerlo en un bol con mantequilla.
Servir con yogur y verduras. Disfrute.
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