¿Qué opinan los rusos sobre la guerra en Siria?

EPA
Hace más de un mes comenzó la operación militar rusa en Siria. Durante este tiempo, la actitud de la sociedad hacia el conflicto en Oriente Medio ha dado un salto cualitativo: de la indiferencia a un amplio apoyo a la campaña.

A finales de septiembre, Rusia emprendió acciones militares contra los islamistas radicales en Siria. Según los datos de los dos principales servicios sociológicos del país, el Centro Ruso de Estudio de la Opinión Pública y el Centro Levada, al cabo de dos semanas la mayoría aplastante de la población ya apoyaba la campaña. Una semana y media después, “a causa de los acontecimientos en Siria” el índice de popularidad de Vladímir Putin alcanzó un nuevo máximo histórico y llegó casi al 90%.

Pero, ¿comprenden los rusos a qué bando apoyan, con quién y por qué luchan las fuerzas armadas de Rusia? A juzgar por estas mismas encuestas, la respuesta es “no”.

Hace un año, la guerra en Siria era un tema de escaso interés en Rusia, e incluso entre los que seguían este tema, más de la mitad no apoyaba a ninguno de los bandos del conflicto.

“Esta situación se mantuvo hasta finales de verano de este año, cuando en los medios de comunicación comenzaron a filtrarse datos sobre el envío de tropas a la base rusa en Siria. Para los ciudadanos de a pie, las noticias sobre el nuevo conflicto mundial llegaron aún más tarde, al mismo tiempo que cambiaban los contenidos de los canales de televisión federales cerca del 90% de los rusos obtiene la información de la televisión, nota de RBTH]”,  dice el experto del Centro Levada, Stepán Goncharov.

“Cuando el Consejo de la Federación recibió la solicitud de aprobar el uso de las fuerzas armadas en el extranjero, y cuando se supo que tan solo se trataba de Siria, la primera reacción, por paradójico que parezca, fue el alivio. Temíamos un nuevo recrudecimiento del frente ucraniano, lo que para nosotros habría sido mucho más terrible. Esa fue mi reacción personal, y la de muchos de mis conocidos en las redes sociales”, explicó a RBTH la politóloga Ekaterina Schulmann. Además, muy pronto se vio claro que la campaña siria también era un intento de volver al diálogo con los países occidentales y evitar el aislamiento”, añadió la politóloga.

“Probablemente es lo que hace falta”

En realidad, a pesar del alto porcentaje a favor de la intervención, los rusos no entienden mucho de los entresijos de la política de Oriente Medio, y ni siquiera les interesa entenderlo.

“Si saben algo sobre este tema, es sólo algo basado en las viejas clasificaciones soviéticas: ‘los árabes’ e ‘Israel’. La situación en el interior de Siria y las diversas corrientes islamistas… simplemente no les interesan”, opina Leonti Byzov, del Instituto de Estudios Sociales Integrales de la Academia Rusa de las Ciencias.

La gente forma su opinión a través de los programas de televisión y los informativos, según afirma el sociólogo, y eso queda de manifiesto cuando se les empieza a preguntar en más detalle: ¿quién está en guerra allí, y por qué? “Pero consideran que Putin entiende mejor la situación, y que si el Consejo de la Federación lo aprobó, entonces, probablemente es lo que hace falta”, explica.

Por otro lado, este apoyo es una muestra más de la tendencia antiestadounidense. “Lo principal es que haya un enemigo claro, y que parezcamos mejores que los norteamericanos. Esto ya es suficiente, y lo que sucede allí concretamente no es tan importante”, explica el politólogo de la Universidad Estatal de Economía, Estadística e Informática, Mijaíl Korostikov.

El último estudio de la Escuela Superior de Economía mostró que la opinión pública rusa puede pasar de una posición a otra en un año, según explica Korostikov. Como ejemplo sirve el caso de las relaciones con China. “Hace dos años, China no figuraba en absoluto como aliado de Rusia, y ahora en todas las encuestas es el aliado número uno”, explica.

“No es nuestra guerra”

Entre los rusos también hay quien está dispuesto a irse hoy mismo a luchar contra los terroristas, no importa mucho a dónde. La consulta de RBTH al Ministerio de Defensa sobre la cantidad de voluntarios rusos en Siria no recibió respuesta.

Pero, en su mayor parte, la gente dice que ésta “no es nuestra guerra”; los sirios no se han convertido de pronto en un pueblo hermano, y ésta no es una guerra que deba ganarse a cualquier esfuerzo, según resumen los sociólogos.

“Pero la sociedad rusa tiene un punto sensible relacionado con el trauma de Afganistán y, en un sentido más amplio, con el recuerdo de la Segunda Guerra Mundial… En cuanto aparece algo que puede suponer un riesgo de pérdida de vidas humanas, la opinión empeora de forma drástica. La sociedad está dispuesta a alegrarse de las muestras de poder en el terreno militar y en la política exterior, pero no estamos preparados para pagar por ello”, opina Schulmann.

¿Quiere recibir la información más destacada sobre Rusia en su correo electrónico? Pincha en  y reciba cada viernes el material más interesante.

Todos los derechos reservados por Rossíiskaia Gazeta.

Esta página web utiliza cookies. Haz click aquí para más información.

Aceptar cookies