Iglesia de San Juan Crisóstomo en Yaroslavl: obra maestra de las artes dramáticas

Cultura
WILLIAM BRUMFIELD
Nombrado por su ubicación pastoral, el conjunto es una obra maestra medieval.

A principios del siglo XX, el químico y fotógrafo ruso Serguéi Prokudin-Gorski ideó un proceso complejo para conseguir fotografías detalladas y en vívidos colores (véase el cuadro de texto a continuación). Su visión de la fotografía como una forma de educación e iluminación fue demostrada con especial claridad a través de sus fotografías de monumentos arquitectónicos en lugares históricos a lo largo del corazón de Rusia.

Su proyecto fue apoyado por el Ministerio de Transporte, que facilitó que llevase a cabo sus fotografías a lo largo de la red ferroviaria y fluvial de Rusia. Sus viajes por el río Volga resultaron especialmente productivos. Una de las ciudades históricas más ricas en las riberas de este es Yaroslavl, 150 millas al noreste de Moscú.

Aunque ahora es un centro industrial de unos 650.000 habitantes, Yaroslavl goza de una notable concentración de arte y arquitectura eclesiástica de los siglos XVI al XIX. Prokudin-Gorski fotografió la zona en los veranos de 1910 y 1911.

Mi trabajo en Yaroslavl abarca tres décadas, de 1987 a 2017. Quedamos cautivados por la iglesia de San Juan Crisóstomo, para la que sus maestros constructores crearon una estructura famosa por su cerámica policromada y su magnífica corona de cúpulas.

Centro comercial medieval

Fundada a principios del siglo XI por Yaroslav el Sabio (uno de los grandes gobernantes del Rus medieval), Yaroslavl a principios del siglo XIII ya tenía iglesias de mampostería, insólitas en una época en la que la mayoría de los edificios eran de troncos. En 1238, la ciudad fue saqueada por los mongoles durante la conquista del centro de Rusia. Aunque la recuperación del dominio mongol fue lenta, la unión con Moscovia en el siglo XV integró la ciudad en una gran estructura política y económica.

Yaroslavl se benefició como un centro de comercio no solo dentro de la extensa cuenca del río Volga sino también con el norte ruso, que actuaba como una salida, a través del Mar Blanco, para el comercio con Europa occidental. Desde esta posición, la red mercantil de Yaroslavl se extendía desde el Mar Blanco hasta Siberia. Con tales posibilidades comerciales, Yaroslavl atrajo a los comerciantes rusos y extranjeros, principalmente ingleses, holandeses y alemanes.

Solo Moscú podía rivalizar con Yaroslavl en su concentración de nuevas iglesias, patrocinada por una combinación de empresarios ricos, distritos urbanos y asociaciones comerciales. Durante el siglo XVII, las 35 parroquias de la zona fueron testigos de la construcción de 44 iglesias de mampostería, la mayoría de las cuales fueron erigidas después de un incendio que arrasó la ciudad en 1658.

Iglesias en un pasto de vacas

La habilidad de los constructores de Yaroslavl en la formación de conjuntos eclesiásticos fue demostrada de forma más impresionante en Koróvniki, un distrito en las afueras de la ciudad cerca de la confluencia del pequeño río Kótorosl con el Volga. La zona toma su nombre de la palabra rusa korova (vaca) y se utilizaba como pastizal. Los lugareños también se dedicaban a la artesanía cerámica, la fabricación de ladrillos y la alfarería, todos los cuales juegan un papel importante en la estructura y decoración de este conjunto de dos iglesias, con un gran campanario situado entre ellas en el lado oeste. Prokudin-Gorski tiene entre sus mejores trabajos varias fotografías del conjunto.

La estructura principal del conjunto Koróvniki es la iglesia de San Juan Crisóstomo, encargada por los comerciantes Iván y Fiódor Nezhdánov, que están enterrados en su galería sur. Construida en 1649-1654, la iglesia fue remodelada con una decoración más elaborada en la década de 1680 y representa así una amalgama de dos periodos históricos. La suma de las partes rivaliza con la iglesia de Juan el Bautista en Tolchkovo, dado su magníficamente calculado equilibrio de formas.

La simetría comienza en el primer nivel de la iglesia, flanqueada por galerías en las fachadas norte, oeste y sur. En la década de 1680, se construyó un porche decorativo con un techo escarpado a la entrada de cada galería. En su extremo este, las galerías cercadas conducen a capillas dedicadas a la Concepción de Juan el Bautista (en el norte) y de la Gran Princesa Santa Olga en el sur. Los ábsides de la capilla al este se funden en una estructura absidal de cinco partes decorada con azulejos cerámicos. Los techos de la torre sobre las capillas crean realces verticales en las esquinas al este de la iglesia.

Cuando se ven desde el oeste o el este, todos los componentes, incluidos los porches y las torres de la capilla, crean una pendiente piramidal que culmina en un conjunto de tambores cilíndricos y cúpulas. La altura de la corona por encima del techo es superior a la de la estructura básica. Este efecto ascendente se repitió en otras iglesias de Yaroslavl y se convertiría en un estilo característico de Yaroslavl. Una comparación de mis fotografías con las de Prokudin-Gorski muestra que la mayoría de estos elementos se han conservado.

Una obra de arte

El monumento Koróvniki es un excelente ejemplo del intrincado uso del ornamento de la cerámica policromada, que simbolizaba la riqueza y el arte de la comunidad. Aunque Prokudin-Gorski aparentemente no fotografió la fachada este, es especialmente notable por el marco central de la ventana de cerámica, cuyo tamaño le permite ser visto desde el Volga y la convierte en el mejor observatorio para disfrutar del conjunto. La principal manera de llegar a las iglesias Koróvniki era desde el Volga, y los constructores a lo largo de las décadas dotaron al lado este de un aspecto alegre.

El plano básico de la iglesia de San Juan se deriva de los cuatro pilares interiores tradicionales que soportan la cúpula principal, elevada sobre su tambor cilíndrico. Las cuatro cúpulas inferiores de las diagonales son decorativas; sin ventanas, son "ciegas" y no dejan por lo tanto pasar la luz. La cornisa bajo el techo se divide en tres frontones semicirculares (zakomari).

Se ha sugerido que la línea original del techo seguía los contornos curvos del zakomari a la manera de la anterior práctica medieval. De ser así, fue uno de los últimos ejemplos de tal práctica. Otras iglesias de Yaroslavl del siglo XVII tenían techos planos sobre las cornisas decorativas.

La segunda iglesia del conjunto Koróvniki fue terminada en 1669 y dedicada al Icono de la Madre de Dios de Vladímir. Más modesta que la iglesia de Crisóstomo, proporciona un importante equilibrio visual al conjunto, particularmente desde el este. Pensada para los servicios de invierno, la iglesia tenía un techo abovedado entre el primer y segundo piso, para preservar el calor.

Entre las dos iglesias se encuentra el campanario octogonal, construido en la década de 1670 y rematado por una torre alta con tres pisos de aberturas enmarcadas, para mejorar el sonido. Debido a su gran altura (37 metros) y forma esbelta, era conocida como la "la vela de Yaroslavl". Sus numerosas campanas provenían de las fábricas de Demídov, más allá de los Urales.

El límite este del conjunto, con vistas al Volga, está delimitado por un muro de ladrillo y una Puerta Santa que soporta dos pisos octogonales y una cúpula pequeña. La puerta en sí misma es una parte importante del ornamento del conjunto y proporcionaba una entrada alegre desde el desembaque del río Volga.

Recientemente, el conjunto Koróvniki fue entregado por las autoridades de la ciudad a la Comunidad Ortodoxa de Viejos Creyentes local. Sus cultos de adoración se llevan a cabo en la iglesia del Icono de Vladímir, mientras que los trabajos de restauración continúan en la iglesia de San Juan, que es monumento nacional. El acceso a esta última iglesia se puede conseguir con previo acuerdo con el sacerdote.

A principios del siglo XX, el fotógrafo ruso Serguéi Prokudin-Gorski ideó un proceso complejo para realizar fotografías a color. Entre 1903 y 1916 viajó a través del Imperio Ruso y tomó más de 2.000 fotografías con este proceso, que implicaba realizar tres exposiciones en una placa de vidrio. En agosto de 1918, abandonó Rusia y finalmente se instaló en Francia con gran parte de su colección de negativos de vidrio. Tras su muerte en París en 1944, sus herederos vendieron la colección a la Biblioteca del Congreso. A principios del siglo XXI, la Biblioteca digitalizó la Colección Prokudin-Gorski y la puso gratuitamente a disposición del público mundial. Muchas web rusas tienen ahora versiones de la colección. En 1986 el historiador arquitectónico y fotógrafo William Brumfield organizó la primera exposición de fotografías de Prokudin-Gorski en la Biblioteca del Congreso. Durante un período de trabajo en Rusia, a partir de 1970, Brumfield ha fotografiado la mayoría de los sitios visitados por Prokudin-Gorski. Esta serie de artículos comparará las vistas de Prokudin-Gorski de los monumentos arquitectónicos con fotografías tomadas por Brumfield décadas más tarde.

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