6 hermosas razones para viajar por el Anillo de Oro de Rusia

13 julio 2016

Elena Lariónova

Súzdal.

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Monasterios, comida tradicional y antiguas ciudades. El Anillo de Oro de Moscú es un destino obligado donde se palpa la historia.

La ruta de 740 km del Anillo de Oro de Rusia y los pequeños “anillos” alrededor de sus ciudades le mostrará una parte de la curiosa cultura rusa y de la historia de los siglos XII-XVII: los dramas, las luchas por motivos políticos y religiosos, y la caída de unas ciudades y el nacimiento de otras.

Los acontecimientos que tuvieron lugar en pasados siglos dejaron a Moscú tantos puntos de interés turístico, que querrá volver varias veces al Anillo de Oro para verlos todos.

1.Vladímir

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Para los amantes de la antigua arquitectura rusa, Vladímir (a 190 km de Moscú) es una ciudad de visita obligada. En ella se encuentra la mayor concentración de monumentos de la arquitectura de ladrillo blanco del siglo XII, los cuales han sido clasificados como patrimonio cultural mundial por la UNESCO: la catedral de San Demetrio de Vladímir, el templo principal de la ciudad (la catedral de la Dormición), y la puerta dorada de Vladímir, que corona una pequeña iglesia y que es el símbolo de la ciudad desde 1164.

Vladímir no solo es un sitio al que la gente vaya el fin de semana para huir de Moscú, sino un lugar estupendo para quedarse más tiempo y ver los pueblos y aldeas que hay por sus alrededores.

2. Iglesia de la Intercesión del río Nerl

Elena Larionova

A tan solo 15 minutos en coche de Vladímir, en la desembocadura del río Nerl, se ubica la pequeña aldea de Bogoliubovo con una población de 4.500 habitantes. La iglesia de la Interseción del río Nerl es de obligada visita para cualquiera que se encuentre en las inmediaciones de Vladímir. Se trata de un templo de piedra blanca del siglo XII protegido por la UNESCO, al cual se accede por un caminito de piedra a través del prado de Bogoliubovo. No muy lejos de allí hay un colmenar, donde podrá probar miel fresca en panales de producción propia, además de llevarse consigo cuanta quiera.

El segundo lugar más importante del diminuto Bogoliubovo es el monasterio femenino Sviato-Bogoliubski con sus cúpulas azules oscuras y sus muros blancos como la nieve. No puede irse sin probar el pan del monasterio y el kvas- la bebida tradicional a base de trigo- ni tampoco sin ver la catedral de Nuestra Señora con sus ligeros frescos con colores pastel. Y si le gusta sacar buenas fotos, le recomendamos que se quede hasta la puesta de sol.

3.Múrom

Elena Larionova

En el antiguo Múrom, de 862 años de antigüedad, encontrará cuidados monasterios que a día de hoy siguen funcionando, así como templos de los siglos XI-XIII, todo a tan solo unos pasos de distancia; por ejemplo: el hermoso monasterio femenino restaurado de la Santa Trinidad, la iglesia de San-Nicolás-Náberezhnaya, y el monasterio masculino de la Transfiguración. En este último lugar podrá hacer las veces de campanero y tocar la campana de la iglesia.

4.Súzdal

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Súzdal se encuentra a 26 km de Vladímir y es una ciudad museo. Desde el siglo XVI en ella se han construido 11 monasterios. Además, por el camino que lleva al kremlin del pueblo hay un mercadillo desde el que los vendedores ambulantes iban y venían por todo el país desde principios del siglo XVIII. En el mercadillo no olvide comprar juguetes de madera de abeto hechos por artesanos del lugar, ni tampoco escuchar el canto del coro y el toque del campanario del monasterio San-Evfimiev.

Por el camino de vuelta desde Súzdal a Vladímir, pásese por la aldea de Kídeksha, lugar donde desde hace tres siglos se ubica un análogo de la torre de Pisa: un campanario del siglo XVII junto a la iglesia de los Santos Borís y Gleb. A diferencia de la torre italiana, a esta está prohibido subirse por motivos de seguridad, pues está a punto de derrumbarse.

5.Yúriev-Polski

Elena Larionova

Este pueblo histórico, donde ahora residen 19.000 habitantes, fue erigido en 1152 por el príncipe Yuri Dolgoruki, fundador de Moscú (1147) y de otras ciudades pertenecientes al Anillo de Oro. Dese un paseo por el casco antiguo localizado en el centro y hasta el monumento de Yuri Dolgoruki, tras el cual se alza el monasterio Mijailo-Arjánguelski y donde encontrará una exposición de jambajes de madera.

Del antiguo kremlin de Yúriev-Polski sólo han quedado los portones de la fortaleza que habrá de atravesar para llegar a la parte principal: la catedral de San Yuri.

Este edificio, que representa el canon de la arquitectura de los templos del siglo XIII, se encuentra completamente cubierto por grabados de piedra donde se muestran composiciones religiosas, e incluso seres mitológicos iraníes como pájaros con garras y cuadrúpedos con alas. Buscar al elefante entre los numerosos grabados de la catedral de San Yuri se ha convertido en un tradicional ritual entre los viajeros, que no abandonan la ciudad sin antes llevarse consigo imanes donde se puede observar dicho animal.

6.Alexándrov

Elena Larionova

La historia de Alexándrov está ligada a los dramáticos acontecimientos de la turbulenta historia rusa del siglo XVI. El kremlin de Alexándrov fue prácticamente la capital de las tropas del zar ruso Iván el Terrible en los años 1564-1581 y de su política, que se servía de radicales métodos para deshacerse de los “traidores”, tales como la confiscación de la propiedad, ejecuciones y el terrorismo de Estado.

Actualmente el kremlin de Alexándrov es un cuidado complejo turístico con iglesias y catedrales funcionales ubicadas en su territorio. Es posible ver todas las construcciones del complejo con una visita guiada, así como subirse al mirador de la iglesia-campanario de Raspiatskaia.

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Sérguiev Posad es la ciudad más cercana a Moscú, que forma parte de la ruta turística del Anillo de Oro. En coche no se tarda apenas una hora en llegar hasta allí, en autobús un poco más.

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