Rusia responderá al acercamiento de Ucrania a la OTAN

El ministro de Defensa de Ucrania, Stepán Poltorak, presentó una hoja de ruta para las reformas del sector militar que deberían mejorar las condiciones del ejército ucraniano hasta 2020 y  equipararlas a las normas de la OTAN, en la cumbre de esta organización celebrada en Varsovia la semana pasada. Como resultado, algunos países del bloque se propusieron para destinar ayuda económica adicional a Kiev, al tiempo que mostraban su absoluto apoyo a la política del país.

Entre sus próximos planos, Ucrania anunció su adhesión a la misión de la OTAN para patrullar el Mar Negro junto con Turquía, Rumanía y Bulgaria, que baña las costas de todos estos países, además de Rusia.

Este paso ha intranquilizado a Moscú, y el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia se ha apresurado a declarar que trataráesta nueva idea de su vecino del sur “con toda la seriedad y cautela que sean necesarias”.

“Seguimos atentamente este debate y esperamos que no conlleve un aumento del peligro en esta región. Nos reservamos el derecho a tomar unas contramedidas adecuadas”, declaraba a la agencia de información RIA Novosti el viceministro de Asuntos Exteriores, Grigori Karasin.

Cómo es la flota de Ucrania actualmente

Ucrania lleva tiempo declarando su deseo de unirse a la OTAN y formar parte de Europa. El país está aprovechando cualquier oportunidad de participar en las maniobras militares del bloque para mostrar su compromiso con sus políticas.

Sin embargo, debido a la falta de financiación y al escaso servicio técnico de sus naves, la flota ucraniana lleva 25 años en un estado lejos de ser óptimo.

“La flota de Ucrania no tiene su antiguo potencial y requiere una gran inversión para su modernización. Tiene algunos barcos capaces de desempeñar determinadas misiones militares. Pero, en esencia, a Kiev le queda únicamente su buque insignia, el Hetman Sahaidachny, el único buque que podría participar en unas maniobras de este tipo. El resto de la flota está compuesta por pequeñas lanchas patrulla”, comenta a RBTH el observador militar del periódico Izvestia, Dmitri Safónov.

Según el experto, las maniobras de los buques de la OTAN y de Rusia en el Mar Negro es algo así como “nadar en una piscina pequeña en la que las bordas de los barcos chocan unas contra otras todo el tiempo”.

¿Habrá contramedidas por parte de Moscú?

Según el experto militar de TASS, el coronel de la reserva Víktor Litovkin, Rusia no tomará ninguna medida drástica ni temeraria, pero continuará la modernización de la infraestructura militar en la península de Crimea.

“Se han aprobado una serie de medidas para reforzar la seguridad de las fronteras rusas en este territorio, y actualmente el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, se encuentra personalmente llevando a cabo una inspección de la infraestructura militar de la península”, declara el experto.

Litovkin recuerda que Rusia ha modernizado el parque de aviación de combate en Crimea y ha enviado a la región aviones Su-30SM de la generación 4+, capaces de lanzar misiles antibuque. Además, en la península se han desplegado sistemas de misiles costeros con misiles de crucero Bal y Bastion, que pueden derribar objetivos nada más salir del estrecho del Bósforo, el que une el Mar Negro con el Mediterráneo y está controlado por Turquía.

“Rusia también está desplegando radares de nueva generación capaces de controlar la situación acuática, subacuática y aérea en la región. Estamos llevando a cabo una modernización a gran escala de la flota del Mar Negro, que recientemente ha recibido un submarino equipado con misiles de crucero Kalibr, con un alcance de vuelo de hasta 2.500 km”, añade Litovkin.

Según el experto, en caso de extrema necesidad Moscú podría desplegar en la península bombarderos estratégicos de largo alcance Tu-22M3.

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