Proceden a la botadura de un buque científico no tripulado en San Petersburgo

Ciencia y Tecnología
ERWANN PENSEC

El pasado 24 de septiembre se celebró una ceremonia en los astilleros Sredne-Nevski de San Petersburgo para botar un buque de investigación científica no tripulado sin precedentes en Rusia, llamado Pioner-M, según ha informado el Ministerio de Educación y Ciencia ruso en su página web.

“Se trata de un buque único con tecnología de navegación no tripulada. Su diseño fue desarrollado por estudiantes de siete universidades rusas: San Petersburgo, Kaliningrado, Arcángel, Nizhni Nóvgorod, Kazán y Vladivostok. Apoyar a los jóvenes talentos y a los jóvenes científicos es nuestra prioridad. El propio proyecto del barco es un buen ejemplo de cooperación entre la enseñanza superior, la ciencia y la industria. Para el gobierno ruso, este vínculo tiene una importancia fundamental”, declaró Dmitri Chernishenko, vicepresidente del gobierno federal, y añadió que se trata de un acontecimiento importante en el actual Año de la Ciencia y la Tecnología.

La embarcación, de 26 metros de largo y 9 de ancho, puede viajar a una velocidad de 10 nudos (18,50 km/h) y es capaz de operar de forma autónoma durante cinco días en una distancia total de 500 millas náuticas (926 kilómetros). Está destinado a la Universidad Estatal de Sebastopol (Crimea) y llevará a cabo una amplia gama de misiones científicas.

“La oportunidad de realizar estudios prácticos durante todo el año en las aguas del mar Negro y el mar de Azov constituirá la base para la formación de personal científico altamente cualificado en el sur de Rusia. Trabajando a bordo del Pioner-M, los estudiantes y doctorandos podrán adquirir conocimientos sobre los cambios en el ecosistema de las zonas costeras de Crimea, estudiar la influencia del clima, la biodiversidad de los suelos y los paisajes, y la hidrología del mar Negro y el mar de Azov”, dijo Valeri Falkov, Ministro de Educación y Ciencia de Rusia, añadiendo que los estudiantes habían desarrollado el buque bajo la dirección de sus profesores e instructores de la United Shipbuilding Corporation.

Tras la botadura, la construcción del Pioner-M continuará, ya que todavía hay que dotar al buque de sistemas y maquinaria, así como de acabados interiores y eléctricos.

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