Según informó Rbc.ru, citando a la Fundación para Investigaciones Avanzadas (FPI), el pasado 8 de mayo de 2020, a las 22.34 hora de Moscú, los sensores del vehículo submarino autónomo ruso Vitiaz registraron una profundidad de 10.028 metros.
“A diferencia de los dispositivos Kaiko (Japón) y Nereus (EE UU) que operaban antes en esta zona, el aparato Vitiaz funciona de manera absolutamente autónoma. Gracias al uso de elementos de inteligencia artificial en el sistema de control del vehículo, puede sortear los obstáculos de forma independiente y encontrar una salida de un espacio limitado y resolver otros problemas intelectuales”, recalca esta institución, citada por sputniknews.com.
Además, el aparato realizó el mapeo, tomó fotografías y grabó vídeos del fondo marino, estudió además los parámetros del ambiente marino. "La misión duró más de tres horas, sin contar la inmersión y el regreso a la superficie", precisó la fundación.
La inmersión realizada el pasado 8 de mayo hasta el fondo de la Fosa de las Marianas fue la primera fase en la serie de experimentos de Vitiaz, comentó el director de la fundación, Andréi Grigoriev. “Este es el primero de los experimentos programados en el marco del proyecto Vitiaz. Se llevó a cabo junto con marinos rusos y equipos científicos de la Academia de Ciencias de Rusia, contando con el apoyo de la Flota del Pacífico”, añadió.
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