Estos son los tres principales sistemas de armamento ruso probados en Siria

Ciencia y Tecnología
IGOR ROZIN
Tras una exitosa prueba de fuego en Oriente Medio, serán clave en el Ejército ruso del siglo XXI.

Since 2015, Russia has been battle-testing almost all its newest military hardware against Islamic State militants in Syria — from small arms to strategic bombers. 

This article examines the Top 3 developments tested in real battles against IS terrorists.

Caza Su-57

Estos cazas se desplegaron a principios de 2018 en el frente de Siria con el objetivo de probar tanto el rendimiento aerodinámico de la aeronave como las nuevas armas creadas exclusivamente para ella.

“Las armas a las que nos referimos son sistemas de misiles de alta precisión ocultos dentro del caza para reducir la visibilidad del radar”, explica Víktor Murajovsko, editor en jefe de Arsenal de la Patria, a Russia Beyond

Precisó que el radar de los misiles y las bombas, además del calor del motor, pueden hacer que el caza sea detectable por los sistemas de radar del enemigo. A las tripulaciones del Su-57 se les encomendó la tarea de averiguar cómo se comportaban los misiles cuando se lanzaban desde una altura de 5 km, y si los radares de la base aérea rusa de Jmeimim podían detectar un ataque contra los terroristas.

“Los resultados de las pruebas son información clasificada. Pero dado que 18 meses después, la Corporación Sujói se adjudicó un contrato por valor de 190.000 millones de rublos [2.500 millones de dólares] para el suministro de 76 aviones en lugar de 20, todo indica que el Su-57 no tuvo un rendimiento demasiado malo en Siria”, dijo Murakhovsky.

El Su-57 es un moderno caza ruso de quinta generación, desarrollado para competir con los aviones de nueva generación de EE UU; el F-22 Raptor y el F-35 Lightning II.

Se estima que un Su-57 cuesta 34,4 millones de dólares, unas cuatro veces menos que el F-22 Raptor (146,2 millones de dólares).

Terminator-2, vehículo de combate de apoyo a tanques

El Ministerio de Defensa ruso no anunció “oficialmente” el despliegue en Siria de su vehículo de combate de apoyo a tanques Terminator-2. Sin embargo, a mediados del año pasado, se pudo ver en un foto de la base aérea de Jmeimim publicada en los medios rusos.

La tarea clave del Terminator consiste en proteger las formaciones de tanques mientras limpian las zonas urbanas de enemigos. El vehículo está diseñado para eliminar la principal amenaza para los tanques: lanzagranadas y terroristas armados con sistemas de misiles antitanque, que pueden destruir un blindado de 50 toneladas con un solo disparo. Terminator fue creado especialmente para lidiar con estas pequeñas pero mortales amenazas.

El último modelo, Terminator-2, se construyó sobre la base del tanque T-72, pero la torreta ha sido sustituida por un módulo de combate con dos cañones 2A42 de 30 mm, una ametralladora de 7,62 mm, lanzagranadas AGS-17 y, sobre todo, misiles guiados antitanque clase Attaka con punto láser; estos últimos pueden destruir objetivos a un alcance de hasta 6 km.

“El destino del vehículo se está decidiendo ahora. El Su-57 demostró su eficacia en el combate y el número de órdenes casi se cuadruplicó. Podría ocurrir lo mismo con el Terminator”, señaló Murajovski.

La empresa de construcción de maquinaria Uralvagonzavod ya ha anunciado el inicio de los trabajos para crear una tercera versión del Terminator. Pero no se sabe cuándo aparecerá el Terminator-3 en los salones de armas de Rusia y del mundo.

Rifle de asalto AK-12

Antes de entrar en servicio en el Ejército ruso, las fuerzas especiales rusas en Siria probaron el nuevo rifle de asalto AK-12.

Según una fuente de Russia Beyond, los ministerios de seguridad rusos utilizaron Siria como como campo de pruebas para ver cómo funcionaba en condiciones reales de batalla la última modificación del AK.

“La plataforma Kaláshnikov y el 'motor' siguen siendo los mismos, porque funcionan. Pero se ha transformado la ergonomía y ahora resulta más fácil de manejar y es más eficaz. Todo ellos sin pérdida de fiabilidad”, dijo la fuente.

En su opinión, AK es una plataforma óptima para las operaciones en el desierto. “Los rifles automáticos estadounidenses son demasiado sensibles para estas condiciones. Pueden fallar o atascarse en el momento crítico”, añadió.

El AK-12 es la nueva arma principal del Ejército ruso y tiene un calibre de 5,45x39 o 7,62x39 mm. La diferencia clave con sus predecesores es el moderno kit de accesorios, que permite que el arma sea personalizada.

Los operadores pueden añadir una serie de accesorios, desde colimadores, miras láser, empuñaduras tácticas y luces hasta lanzagranadas bajo el cañón.

¿Puede utilizar Turquía las armas rusas que ha comprado contra el país eslavo?